La dieta vegana y vegetariana, tienen diversos beneficios, puesto que es una alimentación saludable en la que se disminuye la ingesta de productos cárnicos o sus derivados, aumentando el número de frutas, verduras, hortalizas y frutos secos en el día.
El realizar un cambio de plan alimenticio es algo que puede ser complicado para algunos, en especial si optamos por comida vegana, ya que estamos acostumbrados al consumo de carne. Ya existen muchos productos que tienen una apariencia y sabor similar a la carne, pero elaborados a base de plantas. Por eso te explicaremos cómo hacer una mortadela casera empleando anacardo y cacahuate.
¿Cómo hacer una mortadela casera?
La mortadela que vemos en los supermercados, es un embutido que se elabora con carne de cerdo procesada, que se presenta en forma cilíndrica, el cual se suele usar para hacer emparedados y múltiples recetas de cocina. A continuación te explicaremos cómo hacer la receta de mortadela sin carne.
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- En un cuenco colocamos 150 gramos de anacardos con 50 gramos de maní tostado sin sal, cubrimos con agua tibia, esperamos 20 minutos. Pasado el tiempo, colamos el tazón.
- En una olla colocamos 500 mililitros de agua y 4 cucharadas de agar-agar, removemos constantemente hasta que rompa el hervor.
- En un vaso de batidora colocamos los anacardos, el maní tostado, 1 cucharada de ajo en polvo, 1 cucharada de cebolla en polvo, 1 remolacha grande cocida, unas gotas de limón, ½ cucharadita de sal, 3 cucharadas de levadura nutricional y el agua con el agar-agar.
- Al tener una mezcla homogénea, pasamos la preparación al molde (previamente engrasado) de tu preferencia. Para un mejor sabor, añade unas aceitunas en rodajas. Metemos a la nevera.
- A la mañana siguiente, desmoldamos y consumimos.
Una vez que ya tengamos lista la mortadela, hay que almacenarlo en la nevera, ya sea que lo guardes en el mismo molde redondo en el que lo hiciste y lo cubras con papel film transparente, o en el interior de un recipiente, evitando que el frío perjudique su textura externa y coloración.
Considera que al ser un producto casero en el que no se emplearon conservantes alimenticios, hay que ser cuidadosos en su almacenamiento para que se mantenga en perfectas condiciones por más tiempo. En el momento en que percibas un mal aroma o presencia de moho, es la señal para desecharlo inmediatamente.
Aplicando cada paso, disfrutarás de una comida vegana, un auténtico embutido casero en el que no se usaron productos de origen animal. Es un alimento que veganos, vegetarianos y carnívoros podrán probar sin problema. No te quedes con el antojo, prepara la receta de mortadela en unos sencillos pasos.