El yogur natural es un alimento saludable que complementa nuestros desayunos y comidas, puesto que es un producto rico en diversos nutrientes, minerales, proteínas y calcio, que son necesarios para el organismo. Ya sea que lo comamos con un buen puñado de fresa, cereales o en forma de algún batido.
En los estantes de supermercado es posible encontrar una amplia variedad de yogures, pero todo es diferente cuando decidimos hacerlo con una receta casera, debido a que lo haces a vuestro gusto, es una alternativa más económica, además de evitar el uso de conservantes y edulcorantes. Para que disfrutéis de su sabor, os explicaremos cómo hacer un yogur casero.
Ingredientes de cocina para hacer un yogur:
- 1 litro de leche entera
- 125 gramos de yogur industrial o un yogur casero que tengas
¿Cómo hacer un yogur casero sin yogurtera?
- Vierte la leche en una olla, prende la estufa para calentar hasta que se formen unas ligeras burbujas alrededor. Sacamos del fuego.
- En un tazón coloca el yogur y vierte un poco de la leche caliente, mezclamos hasta integrar.
- Después añadimos el yogur con la leche a la olla, seguimos mezclando para incorporar todos los insumos.
- Pasa la preparación en un recipiente de vidrio, y envuélvelo con algún paño de cocina, lo dejamos en el interior del horno (apagado) por 6 horas.
- Pasado el tiempo, su textura es espesa, pero para que adquiera más consistencia lo metemos en la nevera.
- Al final es posible endulzarlo con edulcorantes, pero será decisión de cada uno hacerlo.
¿Cómo almacenar el yogur hecho en casa?
Una vez que tengamos el yogur casero listo, debemos mantenerlo en un recipiente de vidrio con tapa, de esta manera evitaremos que se contamine con los aromas y sabores de los alimentos que hay alrededor.
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Mientras se mantenga por más tiempo en la nevera, evitaremos que su fermento se siga desarrollando, la temperatura óptima de conservación debe encontrarse entre los 3 a 8 °C, se estima que si mantenemos sus correctos cuidados, se mantendrá en perfectas condiciones hasta por 8 días.
En la receta fácil se menciona el uso de yogur industrial o yogur casero que ya tuvieras en la nevera, en caso de no querer usar dichos elementos, es posible sustituirlo por fermento liofilizado, es el mismo procedimiento, solamente que por cada litro de lácteo hay que emplear 1 gramo del fermento, con cualquiera de las opciones anteriores quedará delicioso.