RECETA

La forma correcta de preparar lasaña para que no se rompa

Para que sigas eligiendo este exquisito plato, hoy te enseñamos la manera ideal para lograr que tu lasaña salga perfecta.

Lasaña perfecta.Fuente: Unsplash
Escrito en RECETAS el

Es casi seguro que durante estos fríos días otoñales se te haya cruzado por la cabeza la idea de comer una rica lasaña caliente. Pero lo que sucede en muchos casos es que, a la hora de ablandar o hidratar las láminas, surjan dos problemas que producen que al final de cuentas no quieras cocinar esta receta y optes por otra alternativa. Por este motivo es que nosotros te enseñamos algunas técnicas de cocina para preparar lasaña y evitar complicaciones.

Así debes preparar lasaña correctamente. Fuente: Unsplash

¿Cómo hacer lasaña correctamente?

Uno de los problemas más frecuentes al preparar lasaña es que las láminas se peguen entre ellas al hidratarlas, y el otro, que se rompan por haberse pegado. En todo caso, tenemos dos alternativas para que esto no te vuelva a pasar. Para evitar esto, lo primero es coger un recipiente lo más ancho posible, ya que así menos placas tendremos que superponer. Esto nos ayudará a que disminuya el riesgo de que se peguen.

Con la bandeja o recipiente listo, agregamos las primeras láminas, las cubrimos con agua templada y colocamos sobre ellas un trozo de papel film que las cubra por completo. De esta forma, podremos poner la siguiente capa de placas de lasaña, cubrirlas con agua y repetir el proceso. Entre cada capa que pongamos habrá que colocar el papel film.

Fuente: Unsplash

Técnica de cocina para que la lasaña te quede perfecta

Otra de las técnicas de cocina alternativas para que nuestra lasaña salga perfecta, si no tenemos papel film o preferimos no utilizarlo, es untar las placas con algún aceite de oliva, mantequilla o margarina. Para realizar este proceso tan sencillo, lo único que se necesita es un pincel de cocina y un poco de paciencia.

En cuanto al procedimiento a seguir es similar: antes de colocar cada una de las láminas se embadurna bien cada una de las placas con el producto elegido, de forma que no quede ningún espacio sin untar. Y una vez puestas en el recipiente o sobre las otras placas, se cubren con agua tibia. Y con estas dos sencillas técnicas de cocina, te aseguras de que las placas de tu lasaña no se rompan y la puedas disfrutar en su mejor versión.