En la amplia variedad de postres andaluces, podemos encontrar múltiples preparaciones, bocadillos dulces que desde hace años las familias preparaban para saciar el antojo de los más pequeños y los más grandes, dando como resultado unos dulces típicos de pueblo, que hoy en día siguen siendo los preferidos de todos.
Los Soplillos o suspiros de la Alpujarra, es un tipo de merengue que tiene trozos de almendra en su interior, que al hornearse tiene una consistencia crocante, creando una gran sinfonía de sonidos en boca. Si no has tenido la oportunidad de probarlo, ahora es el momento, puesto que te explicaremos cómo recrear el dulce andaluz con una receta casera.
¿Cómo hacer los soplillos de la Alpujarra?
Ingredientes de cocina necesarios:
- 4 claras de huevo
- 1 ½ taza de azúcar
- 180 gramos de almendra tostada y sin corteza
- 1 cucharada de zumo de limón
- 1 cucharadita de ralladura de limón
- ½ cucharadita de canela molida
Receta de los merengues franceses:
- En un bowl colocamos las claras de huevo, batimos con unas varillas eléctricas. Cuando se forme una espuma superior, añadimos el zumo de limón, seguiremos batiendo hasta el punto de nieve.
- Al llegar a la consistencia deseada, incorporamos el azúcar poco a poco y constante, mientras sigue batiendo.
- La preparación estará lista cuando se empiece a formas una crema densa y espesa, se estima que en 10 minutos logrará el resultado deseado. Añade la ralladura de limón y la canela molida, removemos hasta integrar.
- Troceamos las almendras, no debes triturar en exceso. Lo incorporamos al merengue, y removemos con una espátula haciendo movimientos envolventes.
- Sobre una charola con papel de horno, vierte la preparación anterior, puedes apoyarte con una cuchara para helados, así obtendrás una preparación uniforme.
- Metemos al horno precalentado a 150 °C, cocinamos de 35 a 45 minutos.
- Dejamos enfriar para poder probarlo.
¿Cuáles son los errores comunes al hacer merengue?
En realidad, el merengue francés es uno de los más sencillos de hacer, pero hay algunas situaciones que son capaces de perjudicar el resultado esponjoso que deseamos. Muchos optan por el uso de sal para mejorar la textura del batido, aunque en un principio si nos ayuda, conforme pase el tiempo perderá estabilidad, mejor usa crémor tártaro o zumo de limón.
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Otro punto importante a considerar, es la forma en que añadimos el azúcar, no debe ser rápido, hazlo poco a poco para que se pueda disolver en la mezcla, de lo contrario, no se mezclara el azúcar y después formará un almíbar que perjudica la textura del postre casero.
La clave de la receta fácil es seguir los pasos y los gramajes mencionados, de esta manera lograremos la mejor textura al salir del horno, es un postre tradicional que podrás hacer en cualquier época y momento. Sorprende a todos tus conocidos con la elaboración de los soplillos de la Alpujarra, el dulce andaluz que debes probar.