Si se trata de disfrutar de un exquisito postre típico de la cocina española, una rica crema catalana es la indicada. Esta receta es proveniente de Cataluña y mantiene un gran parecido con el crème brûlée o la misma natilla, la cual consiste en una preparación a base de yema de huevo que se suele cubrirse con una capa de azúcar caramelizada en su superficie para aportar un contraste crujiente y de dulzor.
Origen de la crema catalana
Esta preparación aparece en los recetarios medievales más antiguos de Cataluña como lo son; Llibre de Sent Soví (siglo XIV) y Llibre del Coch (siglo XVI), pero gracias al paso de los años y la recreación masiva de esta receta dulce, logró consolidarse como una de las preparaciones más sobresalientes de la cocina catalana, gracias a su sabor, consistencia deliciosa y facilidad para prepararse.
Existen formas muy particulares de poder preparar este clásico antojo, sin embargo, en esta ocasión podrás disfrutarla sin lactosa, pensando en aquellas personas que por alguna razón médica o gustos alimenticios no pueden disfrutar de los lácteos, pero sí podrán deleitar de una deliciosa crema catalana con el mismo sabor y textura de siempre.
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¿Cómo elaborar una crema catalana sin lactosa?
Esta es la sencilla receta e ingredientes que debes de tener a la mano, descubre el proceso paso a paso para disfrutar de este clásico y delicioso postre español.
Ingredientes:
- 500 de leche sin lactosa o vegetal
- 4 yemas de huevos
- 125 gr azúcar
- 20 gr de fécula de maíz
- 1 rama de canela
- 1 cda de ralladura de naranja o limón para decorar
Preparación
Toma dos cucharadas de la leche sin lactosa y agrega en un bol, mezcla con la fécula de maíz hasta disolverla completamente.
Coloca el resto de la leche en una pequeña olla junto con la ralladura de naranja o limón, además de la rama de canela partida en varios trocitos para darle sabor y aromatizar la leche.
Cocina a fuego medio bajo, revolviendo constantemente para evitar que la preparación se pegue. En el recipiente en donde reservaste la fécula de maíz, agrega las yemas de huevo y mezcla con ayuda de un batidor de globo con movimientos envolventes para que monten un poco.
Agrega el azúcar y bate nuevamente. Vierte la preparación anterior a la mezcla principal, pero antes retira la ramita de canela, cocina todo a fuego medio y mezcla con frecuencia hasta que espese. Una vez que adquirió una textura espesa, es momento de apagar el fuego y dejar reposar un poco, cuando la preparación se encuentra a temperatura ambiente vacía en pequeños recipientes individuales y lleva a la nevera por al menos dos o tres horas para que termine de tomar consistencia.
Cuando esté bien fría, espolvorea con azúcar por encima y quema con un soplete hasta tener una costra ligeramente dorada y crujiente. Disfruta de una deliciosa crema catalana sin lactosa para compartir con tus seres queridos.