El vino tinto y el blanco son bebidas alcohólicas que requiere de mucho análisis, puesto que en cada sorbo que demos se perciben diversos aromas y sabores, los cuales nos indican un poco sobre su elaboración y tiempo de macerado, pero cuando se planea beber una botella de vino con varios años guardado, su olor se encapsula, dificultando su apreciación. Por eso es importante el uso de los decantadores, es así que te explicaremos cuáles son los mejores y cómo decantar el vino.
¿Para qué sirve un decantador?
El decantador es un “recipiente” que se utiliza para airear los vinos, puesto que pasan muchos días, meses o hasta años encerrados en un espacio, generando un aroma poco agradable a humedad, en algunos casos, el decantador favorecerá en la eliminación de esos olores y potenciando las notas olfativas que tiene la uva, también por su peculiar forma favorece la separación de pozos que pueda tener el vino, por eso se recomienda emplearlo en vinos con varios años de maduración.
¿Cuáles son los tipos de decantador y sus beneficios?
Al visitar un supermercado o tienda, encontrarás una gran variedad de decantadores de vino con diversas formas, aunque lo más importante será distinguir los dos tipos de decantadores que existe, es así que te explicaremos ambas para que puedas seleccionar el mejor para vosotros, según VitiViniCultura.net:
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- Máxima oxigenación: Destacan por tener una boquilla realmente grande, suele ser el más usado y conocido, el cual permite una mayor oxigenación de sus olores al momento de caer en el recipiente, ideal para decantar vinos de reserva.
- Mínima oxigenación: Tienen una boquilla muy angosta, además de que su caída en el recipiente será menos pronunciada, haciendo que su aireación será mínima, por lo que se quedarán varios de sus aromas, en realidad se emplea constantemente para separar los posos de las uvas, ideal para vinos jóvenes y sin filtrado.
¿Cómo usar un decantador?
En un video publicado por LIDL España, junto al sommelier Sergi Figueras, explica que en un vino en el que no se percibe tan intenso el aroma, recomienda su decantación, realizando los siguientes pasos:
- Sirve un poco de vino en una copa, lo olemos y pasamos al decantador.
- Realiza movimientos circulares en el decantador, nuevamente servimos en la copa.
- Probamos un ligero sorbo, verifica que tenga un sabor agradable en boca, no debe oler a vinagre.
- Al cerciorarse del sabor del vino, viértelo todo en el decantador, evitando que la botella del vino lo toque. Deja un dedo de vino en la botella para que se queden los pozos.
- Nuevamente, giramos el decantador y servimos en la copa, listo para disfrutar.
Ambos tipos de decantadores de vinos son funcionales, será cuestión de analizar el tipo de vino que vayamos a consumir para buscar la mejor opción, una técnica básica que es importante conocer. Espero que el artículo haya sido de tu interés, y quédate en Gastrolab España para obtener la mejor información sobre la vitivinicultura.