La formación de óxido en utensilios y superficies metálicas es uno de los mayores problemas de este material, ya que en la mayoría de los casos parece imposible eliminarlo. Además, esto no sólo estropea el aspecto estético de la zona afectada, sino que también puede provocar un deterioro funcional o fallo del instrumento.
Por suerte, aunque arreglar esto puede parecer imposible, en realidad existen trucos caseros que son muy efectivos para quitar el óxido de prácticamente cualquier superficie, y este que te voy a compartir es fácil de hacer solo con un ingrediente de cocina.
Es posible eliminar el óxido de los instrumentos y las superficies metálicas, y lo mejor de todo es que solo requiere un ingrediente casero que seguramente todos tenemos: vinagre blanco.
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Para usar este producto para eliminar el óxido de tus superficies metálicas, debes seguir estos sencillos pasos:
Limpia las superficies e instrumentos
Lo primero que debes hacer para eliminar el óxido de tus instrumentos o superficies es limpiar a fondo. El objetivo es mantener las manchas de óxido libres de polvo y suciedad para que el tratamiento con vinagre tenga un efecto directo y pueda reparar fácilmente el óxido.
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Utensilios, herramientas y pequeños instrumentos
Si deseas eliminar el óxido de las herramientas y elementos pequeños como tornillos y tuercas, toma un recipiente lo suficientemente grande como para que quepan completamente en el interior. Luego coloca las piezas oxidadas y cúbrelas con vinagre blanco. Agrega 5 cucharadas de bicarbonato de sodio y mezcla todo perfectamente.
Déjalo reposar durante una o dos horas y después frota las partes oxidadas con un cepillo. Notarás como el óxido desaparece sin esfuerzo.
Superficies y utensilios o herramientas grandes
Los utensilios grandes, inamovibles y las superficies metálicas que no se sumergen fácilmente pueden verse afectados por el óxido. En estos casos, lo que debes hacer es formar una pasta semilíquida mezclando bicarbonato y vinagre en cantidades suficientes. Aplica la pasta sobre la superficie dañada y déjala actuar al menos una hora.
Después, talla con un cepillo hasta que todo el óxido desaparezca.
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Ropa
Ciertas prendas pueden terminar con manchas de óxido por una variedad de razones. En tales casos, aplica vinagre directamente en el área dañada, agregue bicarbonato de sodio y déjelo reposar bajo el rayo directo del sol durante al menos una hora. Frota con un cepillo hasta que la mancha desaparezca.
Así de sencillo es eliminar el óxido de cualquier superficie con vinagre blanco. Es importante que después de aplicar este truco laves bien la superficie para eliminar los restos de óxido y vinagre; si no ha sido suficiente aplica el truco una segunda vez. Finalmente, seca bien con un paño limpio para que no se oxide de nuevo.