El hueso de aguacate es una de las semillas que la gente suele cultivar, muchas de las veces este proceso suele ser tan complicado que se termina por abandonar la idea. Existen diferentes métodos para hacerlos germinar, pero de igual manera el tiempo es demasiado largo. En esta ocasión, te traemos una forma fácil y rápida de hacer que tus aguacates enraicen sin necesidad de utilizar palillos o cualquier otro objeto.
¿Cuáles son las propiedades y beneficios del aguacate?
El aguacate es uno de los frutos con mayor cantidad de propiedades benéficas para la salud del ser humano. Sus altos contenidos en omega 3 son utilizados para crear diferentes tipos de tratamientos de belleza, ya que esta sustancia ayuda a mejorar la apariencia física de la piel y el cabello. De igual manera, sus vitaminas y minerales, ayudan a tener un mejor funcionamiento en diferentes órganos como el corazón. Por otra parte, es el alimento que necesitas al comenzar tus días, ya que te llenara de la energía suficiente para realizar todas tus actividades.
¿Cómo germinar el hueso de aguacate?
- Comenzando ya con el proceso de germinación deberás primero que nada lavar perfectamente los huesos de aguacate; trata de que no quede nada de la pulpa para evitar que se descomponga más adelante.
- Cuando estén listas tus semillas, deberás colocar dentro de tu recipiente las dos servilletas de papel, las cuales tendrás que rociar con suficiente agua; ayúdate de un rociador para evitar que el exceso del líquido. Posteriormente, coloca el hueso dentro del recipiente, pero procura que la base este hacia la abajo, ya que es ahí donde germinará.
- Finalmente, deberás tapar perfectamente el envase donde lo realizaste el germinado y realiza un pequeño agujero en el centro. De esta manera, lograremos que tenga el oxígeno que necesita para comenzará a crecer; en caso de no poder realizar la ventilación por alguna razón, solo tendrás que dejarlo semi cerrado, solo para que entre un poco de aire.
Pasado los 30 días, comenzarás a notar cómo van creciendo las raíces en el hueso de aguacate. Recuerda mantener siempre húmeda las servilletas de papel para que su proceso continúe satisfactoriamente, deja reposarlo cerca de una fuente de calor, pero evita el contacto directo con el sol. Cuando haya enraizado fuertemente, podrás trasplantar tu hueso de aguacate a una maceta con tierra o abono orgánico.