Recuerdo cuando mi mamá tenía su caja exclusiva de maquillajes, y en ese momento me di cuenta de la gran variedad de productos que hay y su evolución de cada uno de ellos, en especial de las esponjas, que inicialmente eran cuadradas y planas; ahora hay de formas redondas y de texturas diferentes. Al tener muchas ventajas, también debemos limpiarlas constantemente, por eso aquí te explicamos la forma correcta para limpiar tus esponjas de maquillaje y hacer que se vean como nuevas.
¿Para qué sirven las esponjas de maquillaje?
Anteriormente se utilizaban las esponjas clásicas, que se caracterizaban por ser triangulares o circulares, pero realmente no eran esponjosas, por lo que fácilmente se rompían y se desechaban. Tras la llegada de la Beauty Blender (forma de huevo), se revolucionó el mundo del maquillaje, dándonos un acabado profesional y difuminando las marcas que dejan las brochas, pues logra llegar a las zonas más pequeñas (párpados, ojeras o pliegues) y evitando la absorción total de nuestro maquillaje.
¿Cómo limpiar las esponjas de maquillaje?
Ingredientes:
- ¼ taza de vinagre de limpieza
- 3 chorros de lavavajillas
- 1 puñado de bicarbonato
- 1 ½ tazas de agua caliente
Procedimiento:
- En un recipiente hondo colocamos todas las esponjas que deseemos limpiar. Vamos a cubrirlas con agua caliente. Añadimos el bicarbonato, el jabón y el vinagre, dejamos reposar por 20 minutos.
- En este punto verás que el agua empieza a impregnarse de los colores del maquillaje impregnado en tus esponjas, sácalas todas, enjuaga y retira el exceso de agua apretándolas. Dejamos sobre una hoja de papel absorbente hasta secar totalmente.
¿Qué pasa si no lavo las esponjas de maquillaje?
Aunque nuestra Beauty Blender no absorbe tanto maquillaje, con el tiempo se adhiere parte del maquillaje que usemos, provocando que se acumulen bacterias, que pueden dañar los cosméticos que usamos y repercutir en nuestra piel con la aparición de irritación o granos. Los expertos recomiendan lavarla después de cada uso, en caso de no poder hacerlo por lo menos lavarla cada 15 días y renovar tu esponja mensualmente para así cuidar la salud de tu piel.