A todos nos gustan los experimentos, sobre todo a los pequeños, pues es una forma divertida de aprender y descubrir cosas nuevas. Seguramente recuerdas aquellos experimentos que hacías, mezclando refresco con pastillas de menta, o incluso sirviendo todas las bebidas de la fuente de sodas en el mismo vaso para saber cómo sabía. Y es que los niños son muy curiosos, por eso aquí te enseñamos 3 experimentos caseros que puedes hacer con ingredientes de cocina.
Realizar experimentos con tus hijos, sobrinos o estudiantes es una forma muy divertida de fomentar su curiosidad y estimular su mente, pero no siempre tenemos acceso a un laboratorio con todos los materiales necesarios. De cualquier modo, déjame decirte que no los necesitas, basta con una simple cocina y algunos ingredientes que seguro tienes en casa.
Los experimentos caseros son una excelente opción para pasar tiempo con los pequeños, pues además de ser una forma divertida de aprender, son baratos, seguros y fáciles de hacer. De cualquier modo lo más recomendable es que todos estos se realicen bajo la supervisión de un adulto.
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1. Huevo de goma
¿Qué pasa si dejas caer un huevo? naturalmente se rompe... ¿o no? Para este experimento solo necesitas un huevo, un frasco de vidrio con tapa y una botella de vinagre.
Instrucciones
- Abre el frasco, coloca dentro el huevo y rellena con vinagre hasta que quede completamente cubierto.
- Cierra y mantenlo así durante 2 días.
- Abre el frasco y saca el huevo ¡descubrirás que se ha convertido en un huevo que bota!
Explicación
La cáscara porosa del huevo permite la entrada del vinagre, cuyo ingrediente principal es el ácido acético, que va disolviendo la cáscara mientras endurece parcialmente el interior, logrando así esa textura gomosa.
Foto: Pexels
2, Limón volcánico
En este experimento vamos a descubrir qué pasa si mezclas bicarbonato con ácido. Solo vas a necesitar un limón, un poco de gel para manos y un poco de bicarbonato sódico.
Instrucciones
- Corta el limón por la parte superior y exprímelo. Reserva el zumo obtenido.
- Añade gel en el interior del limón, seguido de una cucharada de bicarbonato.
- Por último, vierte el zumo que habías exprimido dentro del limón y verás como entra en erupción.
Explicación
El limón tiene ácido cítrico que mezclado con el bicarbonato forma dióxido de carbono, un gas que, mezclado con lo anterior, produce la efervescencia.
.3. La zanahoria buena, la mala y la fea
¿Cuál es el efecto del agua en las verduras? con este experimento vamos a descubrir lo importante que es mantenerse hidratados. Necesitas una zanahoria, 2 vasos, una cucharada de sal, una de azúcar y agua.
Instrucciones
- Corta la zanahoria en tres trozos iguales.
- En un vaso de agua añade el azúcar y en otro la sal. Rellena con agua.
- Mete en cada vaso un trozo de zanahoria diferente y deja otro fuera del agua. Espera 48 horas.
- Pasados los dos días, revisa el progreso de las zanahorias, verás que todas han cambiado.
- La zanahoria que no está en agua se ha deshidratado y arrugado.
- La zanahoria que ha estado en agua dulce habrá aumentado de tamaño.
- La que ha permanecido en agua con sal habrá reducido su tamaño y podrido.
Explicación
La zanahoria contiene una buena cantidad de agua y nutrientes. Al cortarla, esta deja de poder contener el agua en su interior, por eso el trozo que se quedó sin agua se seca. En el agua dulce la zanahoria absorbe parte del líquido para tomar los nutrientes, lo que hace que aumente de tamaño. En cambio, el agua salada entra en la zanahoria para robarle el agua de adentro.
Foto: Pexels
Como puedes ver, estos experimentos son muy sencillos, pero sin duda despertarán la curiosidad de tus pequeños. Si después de un experimento quieren intentarlo cambiando de ingredientes no dudes en intentarlo, tal vez descubran otro gran secreto de la ciencia.