Todos tenemos tuppers en casa. Son un elemento clave, ideal para nuestra cocina, ya que nos permite almacenar todo tipo de alimentos. Ya sea para llevar comida al trabajo, la escuela o simplemente para almacenar en la nevera. Sin embargo, sucede que para dejarlos limpios, muchas veces nos encontramos con varias dificultades. Pero tranquila, a continuación te vamos a contar cómo limpiar los tuppers para dejarlos impecables, nuevamente transparentes y sin olor.
Te podría interesar
¿Cómo limpiar los tuppers?
Primero vamos a echar un poco de jabón con una cucharadita de bicarbonato de sodio dentro del tupper. Utiliza agua templada para hacerlo. Introduce una servilleta o un trozo de papel de cocina, cierra el recipiente y agita durante un minuto, de manera fuerte.
Para quitar las manchas, solo vas a usar agua y bicarbonato de sodio. Las vas a introducir en el tupper hasta formar una pasta densa, luego vas a frotar con tus manos por un minuto, ciéralo y déjalo reposar durante 30 minutos. En caso de fracasar, otro gran tip que puede funcionar para limpiar tus tupper es la pasta dental blanca. Debes vas a frotar con tus dedos toda la superficie interna y externa del tupper. Y Luego vas a retirar con un trapo húmedo. Así devolverás el brillo a tus tuppers.
El truco definitivo para limpiar tuppers viejos
Para luchar contra esos tuppers viejos y amarillentos vas a necesitar vinagre blanco, agua caliente, jabón líquido y bicarbonato de sodio. Vas a llenar los tuppers con el vinagre blanco. Ciérralos y déjalos reposar de dos a tres días. Pasado este tiempo tira el vinagre y lávalo con agua caliente y el jabón. En cuanto esté seco vierte una cucharada de bicarbonato y deja reposar dos horas para retirarlo. Lava y seca con una servilleta o papel absorbente.
Cómo elegir un tupper para evitar el envejecimiento prematuro
Es muy importante que sepas que los plásticos con los que se elaboran los tuppers podrían desprender tóxicos en los alimentos que contienen. Procura escoger aquellos que no contienen bisfenol A (BPA), un químico industrial que se utiliza para fabricar policarbonato y que puede resultar muy tóxico, advierte la Agencia Europea de Sustancias y Mezclas Químicas (ECHA, por sus siglas en inglés).