Al cocinar brócoli, como cualquier otra verdura, se puede correr el riesgo de ingerir alguna bacteria o microorganismo que afecte nuestro sistema digestivo y que desencadene intoxicaciones. Frente a esta situación, se puede hacer un procedimiento muy sencillo para desinfectar el vegetal y utilizarlo en cualquier receta.
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El brócoli es uno de los vegetales más nutritivos y además no se traduce en calorías significativas. Este aspecto resulta ideal para incorporarlo en dietas para adelgazar. Este alimento es muy rico en agua y fibra, además contiene vitamina C, potasio, betacarotenos y ácido fólico. Ya sea para cocinarla al horno, a la plancha, en el microondas o al vapor, es necesario someter esta verdura a un proceso de desinfección.
Lo primero que debes hacer para desinfectar el brócoli es colocar tres tazas de agua en un recipiente y añadir una de vinagre blanco. Luego sumerge el vegetal en trozos y deja reposar por 30 minutos. Transcurrido ese tiempo, retira la verdura y enjuaga con abundante agua. Para más efectividad en el proceso, puedes utilizar un cepillo.
Al utilizar un cepillo de cerdas suaves para frotar despacio todo el vegetal, estarás eliminando por completo bacterias o gérmenes que puedan quedar luego de la inmersión en la solución desinfectante. Posteriormente, deberás enjuagar el brócoli para terminar el procedimiento, secarlo y cocinar al horno con la receta de tu preferencia.
La manera de desinfectar esta verdura tan nutritiva, también puede replicarse con frutas y vegetales de piel dura: melones, sandías, pepinos o patatas. La maniobra permitirá también borrar rastros de pesticidas que puedan traer en sus cáscaras. Pero para los alimentos más rugosos o con ramilletes, como el brócoli o la coliflor, se deben sumergir con el procedimiento anteriormente explicado.