Consumir garbanzos durante la semana es una de las maneras de incorporar legumbres a tu dieta saludable. Este tipo de alimentos aportan cantidades significativas de vitaminas y minerales esenciales para nuestro organismo y además contienen mucha proteína.
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Lo cierto es que a la hora de cocinar garbanzos, no hay que saltarse el proceso de remojo para ablandarlos (que puede ser de entre 12 a 16 horas), ya que luego podemos tardar mucho tiempo para cocerlos para que queden con la textura ideal para guisos, hummus, potajes o ensaladas, entre otras preparaciones. Esta legumbre requiere, por lo menos, entre 90 y 120 minutos de cocción para que quede tierna. En una olla a presión el periodo se acorta bastante: entre 30 o 40 minutos.
En el caso de que no dispongas de tantas horas para remojar los garbanzos antes de su cocción (que puede ser de entre una a dos horas, a menos que se utilice una olla a presión), existe una maniobra sencilla para hacerlo en solo 15 minutos. El procedimiento consiste en colocar las legumbres en un bol con agua.
Una vez que dispongas de los garbanzos en el recipiente con agua, debes cubrirlos con papel film apto para microondas y hacer un agujero en el centro con la ayuda de un cuchillo. Luego solo quedará llevarlos a ablandar dentro del artefacto a máxima potencia durante esa cantidad de tiempo indicada anteriormente.
Transcurrido ese tiempo, debes retirar con mucho cuidado el recipiente del microondas, dejar reposar y luego ya tendrás los garbanzos ablandados para poder utilizarlos en el proceso de cocción que desees. También puedes acudir al bicarbonato de sodio para ablandar este alimento: solo agrega una cucharada colmada de este polvo en el cazo con agua donde vayas a disponer las legumbres y deja cocer por unos 10 o 15 minutos.