Todavía se debate el origen certero de la pasta, que está entre China e Italia. Pero es desde este último país donde comenzó a popularizarse este alimento a base de harina de trigo y logró llegar a cada rincón del mundo.
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Existen miles de restaurantes y negocios especializados en la elaboración y cocción de pastas. Y en cada sitio gastronómico del planeta siempre hay algún truco o recomendación de parte de quien cocina, que da como resultado un producto diferente o único. En el caso de este plato tan popular, que suele estar en casi todas las cartas de los restaurantes, también hay algunos aspectos a tener muy en cuenta para hacer la salsa.
El truco que seguro no conocías para que tus salsas queden con la consistencia perfecta para tus recetas consiste en recuperar el agua de cocción del alimento. Esto quiere decir que luego de que cocines los espaguetis o cualquier otro tipo de pasta, debes reservar el líquido sobrante en vez de colar el producto y desecharlo.
Cuando estés cocinando, por otro lado, la salsa que acompañará tu plato de pasta solo tienes que verter un poco de agua de cocer y remover para lograr una consistencia almidonada que ligue mejor con tus espaguetis. Debes cocinar la salsa a fuego medio para que el agua de cocción de las harinas se integre y se funda con el resto de los ingredientes.
Al finalizar el procedimiento de unión de la salsa con el agua de cocer, solo te queda colocar los espaguetis o cualquier otra pasta en una fuente y volcar la nueva preparación que se impregnará mucho mejor. Luego tendrás que añadir el queso en la variedad y cantidad que te apetezca.