Las temperaturas altas y los días largos nos invitan a pasar más tiempo al aire libre, por lo que el patio se vuelve el lugar más atractivo de la casa. Es por esto que queremos contarte sobre algunos cambios y cuidados que puedes hacer en el jardín un sitio práctico, alegre a la vista, un lugar dispuesto para reuniones sociales y familiares de verano y así disfrutar de estos meses de calor.
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Los trucos se basan principalmente en que te tomes el tiempo necesario para observar las plantas, el césped, los muebles, las luminarias y todo lo que tengas en el jardín. Tenemos que realizar una especie de diagnóstico, sobre cuáles son los aspectos y elementos en los que tendremos que trabajar. Lo primero que debes ver es en qué estado están tu césped y plantas, ya que durante el verano el crecimiento es más rápido, pero también corren riesgo de quemarse con el sol.
En las zonas en las que el césped se haya secado, puedes realizar pequeños pozos y rellenar con tierra negra abonada. En lo posible, aprovecha para tirar algunas semillas sobre la tierra que pusiste para que crezca césped nuevo con más fuerza. La poda de tus plantas es fundamental, comienza quitando las ramas secas, las hojas que no se ven bien, las flores marchitas y las partes de la planta que notes que ya han cumplido su ciclo. Al quitar lo que ya no necesita, los nutrientes se repartirán mejor y la planta cobrará más fuerza. Si notas plagas, no pierdas tiempo en eliminarlas antes de que se esparzan por otras especies del jardín y tengas problemas serios.
Los muebles de exterior tienen que estar en buen estado para la llegada del verano, de lo contrario, afectarían de manera negativa el aspecto general. En realidad, las condiciones de los muebles varían según el material del que estén hechos. La madera es muy usada para exteriores porque se funde con el entorno de manera natural y queda muy bien, sobre todo si se la combina con hierro. Lo que se recomienda es que todos los años se les realice un mantenimiento. La humedad, las lluvias y el sol desgastan.
Si tienes senderos en tu huerto, procura que los límites estén bien marcados, sin malas hierbas y con frutos de verano. Uno de los trucos infalibles, si sientes que le puede estar faltando algo, es invertir en un accesorio o elemento decorativo podría ser una buena idea. Una de las opciones son los sillones con almohadones bien mullidos, que invitan a la relajación. Puedes montarlos en la galería, bajo la sombra de un árbol o bien en una pérgola.
Finalmente, incluiremos algo muy importante que es la iluminación. Una buena iluminación, bien pensada y diseñada, marcará la diferencia en veladas con amigos durante el verano. Faroles, luces retráctiles, estacas y hasta guirnaldas de luces; todas estas alternativas darán vida nocturna, también puedes colocar luces solares que además de darle un toque original, te ayudará a delimitar lugares y a economizar electricidad.