Los caracoles a la madrileña es un plato que son una delicatesen para los amantes para el buen comer. La receta de estos caracoles es conocida en el mundo entero, sobre todo, por su puntito picante. Pero son pocos los restaurantes que todavía la tradición de cocinar estos gasterópodos.
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Francia es un país que ha sabido hacer de estos animales un producto de la alta gastronomía, mientras que en España este plato sigue siendo típico de bares y tascas, y no sólo en los de Madrid. En Andalucía es muy común ver el caracol guisado, donde le suelen hacer con un toque de vino fino o hierbabuena. Los caracoles a la llauna, son la elaboración más popular en Cataluña. Y en el Levante no se ve arroz sin caracoles.
A continuación, os presentamos unos restaurantes donde poder disfrutar de unos caracoles a la madrileña buenísimos. Más adelante os presentaremos algunos por el resto de España.
Casa Amadeo es el gran bar madrileño de los caracoles. Ubicado en pleno Rastro de Madrid más de 80 años, es parada obligada un domingo para disfrutar de una caña en su barra y una buena tapa de caracoles. Tiene la suerte de que los puedes pedir para llevar. La base es un caracol gigante, lavado y purgado, acompañado con una salsa de pimentón picante, chorizo y jamón, que deja los paladares con ganas de más.
Casa Jorge. Aquí la preparación de los caracoles no es la tradicional, los elaboran a la llauna, bien preñada de ajo y perejil y presentando en una fuente rectangular. Los que los han probado de esta forma en este restaurante de la calle de Cartagena de Madrid, dicen que son irresistibles, y que no puedes parar de comerlos.
La Taberna de la Elisa. Esencia del Madrid clásico, esta taberna en el Barrio de las Letras, hace un homenaje a este plato con unos caracoles generosos, robustos y preparados a la riojana, con gran cantidad de chorizo, de jamón y un punto picante. Increíbles.