La recurrencia de hormigas en la cocina puede ser un problema frustrante, ya que se siente que por más que se limpie a fondo cualquier rincón, vuelven a aparecer y resulta desconcertante. El motivo por el que estos insectos vuelven a caminar por el sitio es porque se sienten atraídos por olores “azucarados” o dulces.
Te podría interesar
La primavera es una época ideal para la actividad de las hormigas (y de otros insectos), por eso es más frecuente que aparezcan en los meses donde empiezan a subir las temperaturas. Al caminar por los sectores de la cocina, dejan un rastro químico para las siguientes de la fila y estas pasan una y otra vez.
Otra de las razones por las que puede haber hormigas en la cocina es, sin dudas, la presencia de partículas de comida: dulces como frutas, miel y galletas, entre otros. Desde el nido más cercano al sitio, estos insectos pueden olfatear los alimentos, llegar a explorar y llevarse “provisiones” a la colonia.
Las hormigas aprovechan las grietas para colarse por los rincones, esto quiere decir que las juntas de las puertas pueden ser los sitios por los que estén invadiendo la cocina u otro sector del hogar. Por eso se recomienda sellar e impedir ese paso. Otra de las razones es el ingreso por las ventanas.
A través de las ventanas, las hormigas vuelven una y otra vez. Por eso, al igual que las juntas de las puertas, deben ser selladas totalmente. Los marcos de madera son ideales para que incluso puedan aprovecharlos con más facilidad. Y finalmente, el quinto motivo por el que puede haber cantidad de estos insectos en la cocina es por la presencia de algunas plantas dentro del sitio o cerca, ya que esto les sirve de refugio cercano al nido. En ese caso, o se elimina la hierba de allí o se mantiene con sus hojas cortas y “vigilada” de la invasión de colonias.