El aceite está definido como aquel líquido graso que suele utilizarse en la cocina como aderezo o incluso para realizar diversas preparaciones. Ya sea de oliva, de palma, de soja, de maíz, de girasol, o de sésamo, su uso es esencial y prácticamente diario en cualquier hogar.
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El mismo debe conservarse en una aceitera o alcuza, es decir, una vasija de hojalata u otros materiales, generalmente de forma cónica, donde se guarda el aceite para diversos usos. La misma nos permitirá conservar su sabor por más tiempo. Lo cierto es que el envase que utilicemos debe reunir ciertas cualidades como protección, estética y usabilidad. Es por eso que en el siguiente artículo te enseñamos todo lo que necesitas tener en cuenta a la hora de buscar la aceitera perfecta.
Lo primero a tener en cuenta es que el envase que nos permita guardar el aceite debe ser cómodo, ya que esto nos facilitará su almacenamiento y manipulación. No hay nada peor que una botella o envase que termine perdiendo todo su contenido porque no pudimos manipularlo de forma correcta y sencilla. En segundo lugar, aquí el tamaño si importa, ya que hay que tener en cuenta que una aceitera grande pesará más y no será tan cómoda para dosificar el contenido directamente sobre las tostadas o la ensalada.
En tercer lugar tenemos que hablar del material de nuestra aceitera. Hoy en día las podemos encontrar de acero inoxidable, de vidrio o de cristal, de plástico o incluso de cerámica. En cualquiera de los casos debemos tener en cuenta que sea de primera calidad, inodoro, resistente, liviano y que no sea poroso.
En cuarto lugar, busca un pitorro, pico vertedor o boquilla que sea preciso, y que evite derrames y goteos. Por último recuerda que la aceitera debe guardarse en un lugar donde se proteja de la luz, el oxígeno, el calor, los olores y los cambios bruscos de temperatura, ya que esto permitirá que su sabor y calidad se conserven por más tiempo.