El alimento en cuestión es ni más ni menos que el famoso turrón. La historia de este rico alimento tiene varios pasajes interesantes y entretenidos dignos de repasar. Desde ser una comida proscrita, hasta considerarse una moneda de cambio durante la guerra civil española.En las épocas navideñas los estantes de los supermercados se abarrotan de turrones de todos los tipos y colores y es que este alimento es uno de los protagonistas de la época.
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Lo que pocos saben es que esta diva de la navidad es procedente de Alicante, puntualmente en el pueblo de Jijona. Allí se comenzó la producción de turrón en el siglo XVll para compensar la falta de miel creada por la crisis de esa época, su éxito generó que se empezara a comerciar a Madrid y Barcelona y allí comenzó su fama imparable.
Su fama fue tan importante en España que llegó el punto en que el Rey Carlos lV decidió proscribir el turrón para que no compitiera con la producción y venta de los pasteleros madrileños, por lo menos no durante las épocas navideñas. Finalmente el plan no resultó porque el deseo de la gente de consumirlo hizo que se reforzara su venta de manera exponencial, sobre todo para esas épocas.
Otra historia increíble del famoso turrón se dió en tiempos de la guerra civil española. Por aquellos tiempos el turrón ya era un consagrado dentro de los manjares españoles y la gente, al igual que hoy, se desesperaba por consumirlo. La guerra complicó el comercio pero aún así la gente viajaba entre Jijona y Alicante con pescado para intercambiarlo por turrón, así es, se transformó en una moneda de cambio.
Llegamos a nuestros tiempos y por más increíble que parezca el turrón continúa siendo una prioridad durante las fiestas, y el turrón de Jijona continúa siendo el preferido de España. Hay cosas que no cambiarán nunca.