La anemia es una insuficiencia en la cantidad de glóbulos rojos en sangre que dificulta el transporte de oxígeno en la misma. El transporte de oxigeno es importante para mantener saludables nuestros órganos y la falta del mismo hace que te sientas debilitado. Hay muchos tipos de anemias pero la más común es la falta de hierro.
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La anemia puede deberse a tres causas principales: la falta de producción de glóbulos rojos, la rápida destrucción de los mismos o la pérdida de sangre. Uno de los síntomas pocos conocidos de la anemia es la palidez en el rostro ya que el fluido de sangre que irriga la cara le falta oxígeno y las células de la piel funcionan a mitad de motor.
Otro síntoma que podemos tener si padecemos anemia es la insuficiencia respiratoria, si falta oxígeno en la sangre, entonces falta oxígeno en el cuerpo y por consecuencia en los pulmones. Puede costarnos trotar, correr o hacer algún esfuerzo físico o depende del nivel de anemia que tengamos hasta caminar largas distancias.
Además otro síntoma poco común que podemos tener si padecemos anemia es tener manos y pies fríos. Al haber una falta de oxigenación en sangre, el cuerpo empieza a tener problemas para regular la temperatura, sobre todo en las extremidades, incluso a veces sentimos que no podemos calentarlas con nada.
La anemia es una enfermedad bastante común pero es importante prestarle atención. Realízate un análisis de sangre en un chequeo anual para revisar cómo están tus niveles de oxigenación en sangre. Si la anemia es leve puede corregirse con la ingesta de alimentos ricos en hierro y si es un poco más avanzada consulta a tu médico de confianza.