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¿Qué sucede si reutilizamos el aceite de girasol?

Puede ocasionar grandes problemas para la salud ya que liberan sustancias tóxicas.

No es aconcejable reutilizar aceite.Fuente: producción GastrolabCréditos: Fuente: producción Gastrolab
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El aceite de girasol es un aceite de origen vegetal que se extrae del prensado de las semillas de girasol o también llamado chilamate, jáquima, maravilla o mirasol. Es uno de los más utilizados en la gastronomía pero su consumo excesivo puede traer problemas para la salud. En el siguiente artículo, sabrás qué sucede si se reutiliza este tipo de aceite.

El aceite de girasol, principalmente se emplea para hacer fritos como patatas fritas o croquetas. Pero, no soporta las altas temperaturas de cocción y termina oxidándose y a raíz de eso emana sustancias tóxicas que son perjudiciales para el organismo. Por su parte, el aceite de oliva contiene polifenoles que son sustancias que minimizan la oxidación de este producto.

Aceite de girasol. Fuente Pixabay

A raíz del conflicto bélico entre Rusia y Ucrania, se ha podido observar en las góndolas de supermercado un faltante de aceite de girasol. Además, España se encarga de importar este producto por todo el país y los precios han mostrado una considerable suba de precios. Esto genera que muchas personas reutilicen el aceite de girasol para emplearlo en comidas fritas. Esta reutilización puede ser perjudicial para la salud, por lo que no se recomienda volver a usarlo.

Cuando el aceite de oliva se somete a altas temperaturas, los ácidos grasos se ven perjudicados debido a que reaccionan con el oxígeno de los alimentos que freímos. Esto lleva a que se formen polímeros, que está asociada al proceso de autooxidación que se produce vía radicales libres. Lo que consiguen estos radicales libres es oxidar las células de nuestro cuerpo, provocando posibles enfermedades cardiovasculares o pulmonares y que pueden provocar el desarrollo de cáncer.

Aceite de girasol a punto de freír. Fuente Pixabay

Otro problema que surge con el aceite de girasol es la creación de acrilamida, ya que es una sustancia química que se crea por cocinar alimentos que contienen almidón en altas temperaturas. Lo aconsejable es desechar el aceite utilizado porque puede empeorar el sabor del producto. Si bien puede reutilizarse siguiendo algunos consejos, lo aconsejable es desecharlo y buscar otras opciones.