El limón es el nombre de uno de los cítricos más conocidos y se caracterizan por tener un sabor ácido y fragantes. Su principal uso es culinario donde es el ingrediente principal de muchos platos y postres. Además, sirve como aderezo para ensaladas y otras comidas. Pero, no es el único uso ya que el limón tiene otras grandes propiedades.
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Originariamente, los limones se han encontrado en la región de Sicilia y España en el siglo XIII. Comenzó a usarse en el mundo de la gastronomía y posee un alto contenido de vitamina C y ácido cítrico. Se emplea para elaborar postres y dulces, en bebidas naturales como limonada. Además, las rodajas de limón se utilizan para agregarle a las bebidas y cócteles. Muchas personas, también se emplean para preparar salsas, aliños y vinagretas.
El limón, por otro lado, contiene propiedades nutritivas y antioxidantes, pero se aconseja no consumir limón en exceso, ya que puede traer algunos problemas. La ingesta elevada de vitamina C hace que se produzcan patologías como gastroenteritis, acidez, calambres abdominales o diarrea. Además, el contenido ácido del limón puede irritar el intestino generando malestar. Por eso, se recomienda consumir este alimento con moderación.
Por otro lado, el limón es un cítrico que contiene propiedades estéticas y se usa para blanquear las manos, para desodorizar las axilas, para dar brillo al cabello y también para la elaboración de una mascarilla. También, el aceite de limón es utilizado en la perfumería. Pero, no son las únicas propiedades y por eso debes prestar atención.
Entre los beneficios principales que posee el limón, se encuentra: favorece en la pérdida de peso y previene gestos de cáncer, combate el estreñimiento y problemas intestinales. Además, el consumo de limón sirve para prevenir enfermedades respiratorias como gripe, resfriado y hasta anemia. Por último, cuidará la piel, evitando brotes de acné.