La tortilla de patatas es uno de los platos más tradicionales en la gastronomía española, a pesar de que es una comida muy consumida, su elaboración tiene varias dificultades como lo es que los huevos se te peguen a la sartén arruinando toda la tortilla, y la sartén también. En este artículo te contamos como evitar que te suceda este inconveniente y cocinar la mejor tortilla de patatas.
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¿Cómo preparar tortilla de patatas?
La realidad es que la elaboración de este plato es bastante sencilla, para prepararlo, solo hace falta patatas, huevo y, cuando así se quiera, cebolla, así como un poco de aceite y sal: nada muy complejo. A pesar de que el proceso es bastante sencillo, durante la elaboración de una tortilla de patatas podemos enfrentarnos a un problemita que puede echar por tierra toda nuestra receta, que el huevo se quede pegado a la sartén, una situación muy molesta que puede convertir a nuestra tortilla en un revuelto poco agradecido.
¿Cuál es el truco para evitar que la tortilla de patatas se pegue a la sartén?
Para evitar esta situación, es imprescindible que contemos con una buena sartén antiadherente que todavía mantenga sus propiedades, ya que así se reducirá el riesgo de que el huevo se quede pegado. Sin embargo, hay otro elemento que juega un papel importante en este proceso: el aceite, siempre en su justa medida.
Cuando se prepara una tortilla de patatas, se tiende a pensar que, a mayores cantidades de aceite, menos probabilidades hay de que se pegue. La teoría es cierta, pero inundar nuestra sartén con aceite puede ser contraproducente, tanto para nuestra salud como para el propio sabor del plato, por ello, es fundamental que encontremos un equilibrio que nos permita disfrutar del sabor de los ingredientes sin correr el riesgo de romper nuestra tortilla.
Para conseguir el punto justo de aceite hay un truco, consiste en verter un buen chorro en la sartén y esperar a que se caliente, cuando el mismo ya esté humeante y empiece a esparcirse por toda la superficie, tendremos que retirarlo y verter la mezcla de patata y huevos sobre el aceite residual que quede en la sartén. De este modo, la superficie de la sartén estará empapada de aceite, lo que evitará que el plato se pegue, y nos libraremos del exceso que pueda afectar a los ingredientes, dando como resultado una perfecta tortilla de patatas.