La nevera es el lugar donde intentamos que los alimentos no se nos echen a perder. Pero al contrario de lo que creemos, no todos los productos son buenos para meter al refrigerador por más que la abuela te lo haya dicho. Algunos alimentos al estar expuesto al frio, pueden perder su sabor y ya no servirán para el plato perfecto.
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Por lo dicho, es bueno saber que alimentos hará que nos duren más y los comamos en su momento óptimo de madurez y sabor, para sacar todos los nutrientes. Comer los alimentos muy fríos nos deja sin sabor, lo que hace que todos nos sepan igual. Y es que hemos perdido la práctica de conservar los alimentos como se debe.
Los alimentos que no debes guardar en la nevera
Un alimento importante que no debe estar en la nevera es el jamón serrano, pues debe conservarse en un lugar seco, sin luz a ser posible, y con una temperatura estable. No en la nevera. Otro producto son los tomates, si hay bajas temperaturas el jamón pierde el aroma y su sabor. Puedes estropear un jamón muy bueno por guardarlo donde no debes.
Con los quesos curados ocurre igual. Son el único queso que es mejor que no esté en el refrigerador, sí a oscuras, sí tapado, sí lejos de cambios de temperatura y de la luz. El frío altera las propiedades, haciendo que se reseque, se agriete y pierda gran parte del aroma y de su sabor inigualable.
Un alimento con gran dilema son los plátanos. Deben quedarse a temperatura ambiente, y si vemos que se empiezan a pochar, empiezan a madurar más rápido de lo que deben, envolvemos la punta con papel film transparente y así ese proceso se ralentiza un poco. Es decir, nada de frio.
El chocolate se estropea en la nevera, le sale una capa blanquecina y tiene menos sabor. Y es que las bajas temperaturas alteran sus propiedades y lo empeoran. Temperatura ambiente y alejado de la luz. Un buen cajón de chocolate o un mueble, y listo. El caso del pan es lo mismo, se estropea todo el sabor y pierde calidad.