Durante las temporadas de olas de calor, con la finalidad de mantener en perfecto estado nuestros alimentos, creemos que todo debe almacenarse en la nevera, pensando que el frío favorecerá en la conservación de alimentos. La realidad es que hay insumos que pueden mantenerse en perfecto estado a temperatura ambiente, y que el simple hecho de estar en la nevera aumenta el consumo de energía del electrodoméstico. Es así que hoy te explicaremos qué alimentos no deben refrigerarse.
¿Qué pasa si lleno mucho mi nevera?
Muchos de nosotros tenemos la mala costumbre de llenar nuestro frigorífico con alimentos, llegando al punto de ya no tener suficiente espacio para otros productos. A simple vista, parece una acción sin gran relevancia e inofensiva, la realidad es que al momento en que nosotros hacemos eso, evitamos que exista un correcto flujo de frío, provocando que nuestro electrodoméstico necesite de más electricidad para lograr esparcir la temperatura por todos lados, además de evitar una temperatura estable para disminuir los efectos de descomposición, así lo mencionan en higieneambiental.com
¿Qué se debe refrigerar y qué no?
Necesitan refrigeración
Los alimentos que sí deben refrigerarse, son todos aquellos que se consideran perecederos, que en temperatura normal tienen una poca duración de vida, dentro de los cuales destacan la carne cruda (res, pollo, cerdo, pescados y mariscos), embutidos, alimentos procesados, lácteos, mermeladas, aderezos y platillos ya preparados (tapados), así lo mencionan en la Food and Drug Administration.
Te podría interesar
No necesitan de refrigeración
En el caso de aquellos alimentos que no debemos refrigerar se encuentra el pan, tomate, miel, ajo, café, patatas, cebollas y cereales, muchos de estos productos al estar en contacto con el frío perderán sabor, textura y aroma, además de acelerar la producción de moho y su descomposición, según ClikiSalud.
¿Cómo debemos acomodar el refrigerador?
Una vez que hayamos sacado todos los insumos que no deben estar en la nevera, entonces deberás tomar en cuenta que debemos de acomodar nuestros alimentos en cada espacio de la nevera, ayudándonos a conservar mejor los alimentos y evitar la contaminación cruzada, a continuación te explicamos cómo, según la Comunidad de Madrid:
- Estante superior y central: Recetas ya preparadas, lácteos y embutidos.
- Estantes inferiores: Carne y pescado crudo, incluso los alimentos que vayamos a descongelar.
- Cajón de “verduras”: Frutas y verduras.
- Puerta: Bebidas, aderezos y salsas.
¡Listo! Siguiendo cada uno de los pasos lograremos la conservación de alimentos de forma correcta en el interior del frigorífico y la nevera, técnicas que evitan la descomposición de los alimentos y la contaminación cruzada. Espero que hayas disfrutado del artículo, si deseas conocer más información sobre los métodos de conservación, entonces quédate con el equipo de Gastrolab España para obtener los mejores consejos de cocina junto con la opinión de los expertos.