España es el sexto país con mayor desperdicio de alimentos en Europa, con 7,7 millones de toneladas al año. Esto es una cantidad alarmante, sobre todo teniendo en cuenta que mucha de la comida que tiramos no está en mal estado, sino que son sobras o productos "caducados" que supuestamente ya no debemos comer, pero que en realidad son perfectamente comestibles.
Consumo preferente
Para reducir la cantidad de alimentos que tiramos, en 2013 el ministerio de Agricultura, Alimentación y Medioambiente eliminó el requisito de establecer la fecha de caducidad del yogur en 28 días después de su fabricación. Fijate en el yogur que hay en tu nevera o la próxima vez que vayas al supermercado. Ahora en lugar de fecha de caducidad tenemos una fecha de "consumo preferente", lo que indica que el producto conserva todas sus propiedades organolépticas hasta entonces, pero eso no significa que su consumo posterior sea perjudicial.
El caso del yogur es el ejemplo más evidente, pero la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) ha advertido durante mucho tiempo sobre el uso prudente del concepto de 'consumo preferente' para muchos de los productos que tienen una fecha de caducidad.
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¿Por qué existe la fecha de caducidad?
Incluso hay quienes dicen que muchas de las fechas de caducidad, diseñadas para avisarnos cuando un producto nos podría hacer daño, podrían alargarse mucho más. Muchos productos (generalmente alimentos frescos) requieren una fecha de caducidad estricta que debemos respetar por el potencial riesgo a la salud que pueden significar, pero hay algunos productores que disminuyen el tiempo de vida de sus productos para obligarnos a comprar con más frecuencia.
El problema con la "vida útil" es que es un concepto confuso. ¿Hasta cuándo se puede comer un alimento pasada la fecha sugerida? En algunos casos, el producto simplemente se vuelve desagradable al desarrollar un sabor u olor agrio, pero en otros, puedes terminar comiendo algo que te provoque diarrea casi de inmediato.
¿Qué alimentos puedes comer después de su fecha sugerida?
Para que no te pierdas y termines desperdiciando comida o, en el peor de los casos, consumiendo algo en mal estado, aquí te presentamos 5 alimentos que puedes comer incluso después de su fecha de caducidad.
Mermeladas y conservas
Un dato curioso sobre el azúcar es que puede ser tanto una fuente de alimento para las bacterias como una forma de mantenerlas a raya. Sucede que muchas bacterias se alimentan de azúcar, propiciando la fermentación. Sin embargo, cuando el porcentaje de azúcar es muy alto, el ambiente se vuelve inhabitable para las bacterias. Es por eso que las mermeladas y conservas, que tienen una buena cantidad de azúcar, pueden durar mucho tiempo, sobre todo si las guardas en la nevera. Así, mientras no presente burbujas o moho, es perfectamente comestible, aún cuando su caducidad indique lo contrario.
Miel
Algo muy similar sucede con la miel de abeja, pues también está compuesta principalmente por un azúcar natural. La diferencia es que la miel nunca se echa a perder, así que si tu miel natural tiene una fecha de consumo preferente, es solo porque con el tiempo se cristaliza y endurece, dificultando su consumo. Pero puedes calentar tu frasco a baño maría y la miel volverá a su estado natural.
Galletas
Las galletas son uno de esos productos que, en realidad, pueden durar bastante tiempo más de lo que se sugiere, ya que la concentración de azúcar y el hecho de que son un alimento seco, evitan que cualquier microorganismo crezca en ellas. Lo que sí puede pasar es que se reblandezcan, pero basta con meterlas al horno durante un par de minutos para que recuperen su textura.
Pan
El pan es otro alimento que puedes conservar y consumir durante mucho tiempo. Solo debes dejar de consumirlo si aparece moho, pero mientras tanto es perfectamente comestible, incluso si se seca y endurece, puedes utilizarlo como pan rallado para empanar tus cachopos. Además, es perfectamente seguro congelar el pan y te puede durar hasta un año dentro del congelador.
Frituras
La mayoría de las frituras también son seguras de comer después de su fecha de consumo preferente, pues tienen una buena cantidad de sal, que desde hace siglos se utiliza para conservar los alimentos por más tiempo. Además, las frituras no tienen la humedad suficiente para que las bacterias se reproduzcan, lo único malo es que con el tiempo se arrancian y cambia su textura, así que puede no ser tan agradable comerlas, pero de que se puede, se puede.
Estos son solo algunos de los alimentos que puedes comer aún después de su fecha de caducidad sin que represente un riesgo para la salud. Pero eso sí, respeta siempre la caducidad de alimentos frescos como carnes y embutidos y desecha cualquier alimento que muestre la presencia de hongos para evitar problemas de indigestión o intoxicación.