Los limoneros son una de las plantas más populares y que mas encontramos en los jardines, ya sea por la estética o por su gran aroma, acompaña y complementa a la perfección los parques de muchos hogares. Aun así, hay veces que este árbol no florece y debemos buscar alternativas para solucionarlo. Para evitar ese problema, te contamos un truco clave para conseguir limones más grandes y jugosos.
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El limonero es una planta muy especial y por eso requiere de riegos frecuentes, sin llegar al encharcamiento. En verano exige ser hidratado cada dos días y en caso de no estar seguro, se puede meter un palito a la tierra, pero con mucho cuidado de no lastimar las raíces. Después, sacar la varita y si ésta sale limpia y sin ningún residuo de tierra, significa que está seca y es momento de hidratarla.
Además, es conveniente abonarlo con líquidos de origen orgánico para generar en el árbol una excelente producción de limones. Para ello, te enseñamos un truco clave para elaborar un abono natural a partir de dos simples materiales como son las hojas de sábila y el agua de lluvia que favorecerán de una manera increíble el desarrollo del limonero.
Para llevar a cabo el truco, lo primero es retirar con cuidado todas las partes marchitas de las hojas de sábila. A continuación, partir la planta en pedacitos con todo y cáscara, y triturar la sábila con un poquito de agua. Lo importante de esta mezcla es que su nivel de concentración sea alto de modo que sólo deberás verter la cantidad justa de líquido para que la planta no se atore en las aspas.
Posteriormente y como paso final, tomar 130 mililitros del concentrado de sábila y combinarlos con cuatro litros de agua y simplemente debes utilizar esta sustancia para regar tu limonero. Al ser constante notarás resultados agradables y lograrás no solo un aspecto vívido de tu árbol, sino también que el mismo produzca unos geniales, grandes y jugosos limones.