Las lentejas están llenas de nutrientes que pueden ayudar a nuestra salud debido a su gran aporte de hierro entre otros, pero también las podemos usar y que sean de gran ayuda cuando se trata de cuidar nuestras plantas, ya que pueden aportar sustancias que van a permitir que tus cultivos se desarrollen correctamente, las raíces estén fuertes, y ayudaran a nutrir la tierra en la que crecerán tus cultivos.
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Vamos a enseñarte unos pequeños trucos para fertilizar tus plantas de forma natural a base de esta legumbre. Gracias a su alto contenido de vitaminas B, ácido fólico, potasio, calcio, fósforo, magnesio, zinc y hierro, vas a ver como tus plantas estarán más nutridas y lo harás de manera muy sencilla.
Ingredientes
- 5 cucharadas de Lentejas crudas
- 1 litro de Agua
Mezcla las lentejas crudas junto con el agua y lleva a la licuadora, procesa hasta lograr un líquido uniforme que deberás colar con un colador fino o un paño algodón para eliminar restos de lentejas, debes lograr separar sólo un líquido que es el que usaremos como fertilizante para nuestras plantas.
Lo que te quede del proceso del colado lo puedes utilizar para agregarlo a tu composta y así aprovechar al máximo esta legumbre. Para aplicar tu líquido fertilizante solo debes colocarlo sobre un atomizador y rocía directamente sobre la tierra que rodea tus cultivos, repite este riego una vez cada semana y comenzarás a ver resultados en el crecimiento de tus plantas.
La otra utilidad que le podemos dar a las lentejas en nuestra huerta o plantas es de enraizante esta forma de usarla ayudan a que las plantas se asiente mejor en el suelo y se desarrolle con una mejor calidad de vida así es que si aún no los utilizas al sembrar es un buen momento para comenzar a hacerlo ahora que sabes de sus ventajas.
Las lentejas deben ser de calidad y por eso se recomienda una germinación en casa, sumerge una taza de lentejas en un recipiente con cuatro tazas de agua, luego tapa el recipiente y se reserva durante tres o cuatro días. Una vez que han germinado, se las bate con el agua y se cuela la mezcla. Finalmente, se lo diluye en agua para que la mezcla no esté tan concentrada y finalmente se riega con el líquido. No hay excusa para que tus plantas estén mal con este gran consejo que te dejamos.