Las fresas es una exelente fruta para una variedad de recetas. Puede ser perfecta para agregarla, sea a un yogur natural, a un bowl de cereal, a un postre, a una ensalada o a un zumo, pero más allá de su sabor ácido, dulce y su intenso aroma, hay muchos beneficios referentes a la salud, por los que se debería comer esta fruta habitualmente.
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Por lo que se conoce de las fresas, están compuestas principalmente de agua con el 89 %, de hidratos de carbono que es alrededor del 7 % y en forma de fructosa, glucosa y xilitol. Según los expertos, esta fruta cuenta con el gran beneficio de ser una fuente rica en vitamina C, que ayuda a mantener el sistema inmune fuerte y a proteger las células del daño oxidativo causado por los radicales libres.
De igual manera, hay tres beneficios de las fresas que seguramente no sabías que existían y te lo contamos. Por un lado, mejora la capacidad cognitiva ya que las fresas son ricas en flavonoides que ayudan a mejorar la memoria, ya que pueden estimular la actividad de los neurotransmisores y aumentar el flujo sanguíneo en el cerebro. Además, son ricas en vitamina C, antocianinas y cobre, por lo tanto, su consumo diario está asociado con el retraso del deterioro cognitivo,
En segundo lugar, un beneficio de la fresa es que combate la obesidad. Contienen buenas cantidades de agua y fibras que ayudan a aumentar la sensación de saciedad, disminuyendo la ingesta de alimentos, por eso se considera ideal en las dietas para bajar de peso. Además, es rica en antioxidantes que ayudan a disminuir la acumulación de grasas en el organismo.
Por último, un beneficio desconocido es que ayuda a disminuir el colesterol. Las fresas contienen polifenoles, (antocianinas), componentes antioxidantes que ayudan a disminuir los niveles triglicéridos y el colesterol LDL, o “malo”, en la sangre. Por esta razón, reduce el riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares, como infarto de miocardio. aterosclerosis o derrame cerebral.