En los últimos meses la economía de nuestro país se ha visto afectada por múltiples factores y uno de los sectores en los que más se ha notado el aumento de precios ha sido en el de los alimentos. Esta situación ha llevado a que muchos opten cada vez más por reciclar la comida, por lo que en este artículo vamos a contarte como con un poco de imaginación y predisposición puedes convertir tus sobras en un menú deluxe.
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Pepa Chacón, periodista televisiva y amante de la cocina y Elisabet G. de Chávarri, profesora de la Universidad Complutense de Madrid y especialista en producción de alimentos de origen animal, proponen en su libro rentabilizar las sobras y descubrir su potencial en una sociedad española que desecha cada año más de 27 kilos de comida por persona.
Para aprovechar las sobras, en primer lugar, hay que tener un buen fondo de despensa ordenado, donde los alimentos con fecha de caducidad cercana estén por delante y los se vencen más tarde, colocarlos detrás. A continuación te comentamos algunos consejos claves de cómo armar un plato genial con tus alimentos reciclados, los cuales, tienen un extra de sabor y dan como resultado platos extraordinarios, mejores que los nuevos.
Huevos rellenos de paella: Una plato de paella del día anterior es el elemento ideal para esta receta de huevos rellenos cocidos sin yema. Encima solo debes debes agregar alioli. Otra opción es el caldo de judías. Es que el agua de hervir de judías verdes y patata es deliciosa si le añadimos una pastilla de caldo, fideos cabello de ángel y huevo duro.
Panecillos de pisto o empanada: Sobras de pisto, con migas de chorizo y queso tierno, son un gran relleno para unos panecillos precocidos (los abrimos y quitamos miga). Al horno 10 o 15 minutos y listo. ¿Otra opción? Usar el pisto, mezclado con bonito de lata, huevos duros desmigados y tomate frito, para hacer una empanada (con masa congelada).
El último de nuestra lista es el Pudding de pan duro. Troceamos pan, magdalenas, bollos o cruasanes duros y les añadimos una mezcla de huevos, nata y leche templada con canela. Lo echamos todo en un molde engrasado y con papel y al horno 35 o 40 minutos. Se pueden añadir pasas y frutos secos y servir con mermelada, crema tipo natilla o helado.