Comer bien no está directamente relacionado con subir de peso. El tema en cuestión es llevar una dieta equilibrada que nos permita quedar saciados pero a la misma vez poder perder peso por eso, hay que agregar alimentos a nuestro organismo que ayuden a la digestión y por supuesto no engorden.
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En la presentación del libro “Por qué me duele la tripa” de editorial planeta, se abordan diferentes patologías digestivas por parte de la licenciada en Ciencias Químicas y máster en dietética y nutrición humana Ángela Quintas. “El sobrepeso y la obesidad tienen una relación estrecha con nuestra microbiota. No solo afectan a nuestro bienestar general, sino que son factor de riesgo de muchas enfermedades.”, agrega la especialista sobre el tratar de comer bien.
Por eso, te vamos a mencionar 5 reglas básicas del buen comer y por supuesto bajar de peso. En primer lugar hay que mezclar hidrato con proteína, tanto vegetal como animal. Si introduces hidratos de carbono y proteínas en las proporciones adecuadas en tu ingesta tu cuerpo producirá una cantidad menor de insulina, de modo que no se activará la lipogénesis y así evitarás acumulación de grasa.
En segundo lugar del comer bien y bajar de peso, debes tener cuidado con los hidratos de carbono líquidos, es decir, con los zumos o gazpacho. Son hidratos de carbono que pasarán muy rápido al torrente sanguíneo y pueden hacer que se active la lipogénesis. También, una recomendación importante es que cuando pasas demasiadas horas de comer tu cuerpo utiliza la masa muscular como combustible, de forma que disminuye tu masa muscular pero no la grasa. Por ello conviene comer cada 3-4 horas.
En un cuarto lugar del comer bien, no dejar pasar más de una hora desde que te levantas hasta que ingieres algún alimento. Después del ayuno nocturno la reserva de glucógeno almacenada en tus músculos y tu hígado está casi agotada. Por último, podemos decir no hacer nunca deporte con el estómago vacío. Es arriesgado porque tu organismo una vez que ha agotado el glucógeno almacenado en tu hígado, y sobre todo en tus músculos, devorará la masa muscular como combustible, con lo cual bajará tu metabolismo basal y no solo no adelgazarás, sino que serás muy vulnerable a las contracturas musculares y a las lesiones.