Las galletas de leche condensada se elaboran muy fácil y rápido. Esta receta incluye maicena y otros ingredientes para dar consistencia a cada unidad, pero también puedes personalizarlas a tu gusto incluyendo pepitas de chocolate, frutos secos o cualquier alimento que sea de tu apetencia.
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Para hacer galletas de leche condensada y maicena tienes que disponer de 180 gramos del primer alimento y 350 del segundo. Además, necesitas una cucharadita de polvo de hornear, un huevo, 60 gramos de mantequilla y dos cucharadas de azúcar. Con estos ingredientes, puedes elaborar un dulce para tus meriendas o desayunos de manera muy sencilla.
En 20 o 30 minutos tendrás tus galletas listas con esta receta. Cabe mencionar que para que estos dulces queden con mucho más sabor a leche condensada, tienes que utilizar una mantequilla que tenga el menor porcentaje de sal posible o que carezca de este componente. Lo primero que debes hacer es conseguir un bol para mezclar los ingredientes.
Luego tienes que mezclar en el recipiente: el huevo, la leche condensada, el azúcar y la mantequilla previamente derretida. Por otro lado, el paso siguiente es juntar el polvo de hornear con la maicena y luego pasarlos por un colador para quitar los grumos. Posteriormente, agrega el resultado obtenido al bol que contiene la otra mezcla de ingredientes.
Cuando juntes los contenidos de ambos recipientes, debes batir hasta incorporar los sabores y la texturas para lograr una masa firme. Luego coloca papel de hornear en una bandeja (o engrasa levemente este objeto para que no se peguen tus galletas), deposita bolitas de masa, aplasta con un tenedor o cuchara para formar los bocadillos dulces y lleva a cocinar durante 12 o 15 minutos con el horno precalentado a 160°C. Finalmente retira, deja enfriar y a disfrutar el resultado.