Es sabido que en Inglaterra la hora del té es sagrada, y esta costumbre es algo inamovible en la casa real. Si bien la reina Isabel II no es exigente en grandes lujos en cuanto a la ingesta de comidas diarias en la casa real, sí lo es para uno de sus gustos preferidos a la hora de tomar el té.
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La costumbre de tomar té no es una hábito exclusivo de Isabel II, sino que empezó en el siglo XVIII, cuando los británicos cosecharon el té robado de China en las tierras indias en su dominio, y así poco a poco, tomar té a las de la tarde, se convirtió en un ritual de la alta sociedad, quien podía adquirir tan preciada y cara especie.
Este dato de la reina Isabel nos llega de la mano de un antiguo cocinero de la Casa Real británica, Darren McGrady, que no solo nos explica cómo preparar el sándwich de la monarca, sino también, que nos explica que no se preocupa por la comida y que solo lo ve como una manera de mantenerse viva. Además relata que la reina no pone mayor atención en los banquetes lujosos ceremoniales, pero la hora del té de la tarde es otro el asunto, esta costumbre la mantiene a diario desde niña, y no la ha cambiado en absoluto.
La receta es simple, sólo necesitas pan de molde blanco tierno sin tostar, mantequilla blanda para poder extenderla bien por la miga sin romperla, y mermelada de fresa de primera calidad, primero untar la mantequilla por las dos rebanadas de pan, después se añade una capa generosa de mermelada de fresa en una de ellas, se cierra el sándwich y se sacan las porciones con un cortador redondo, quedan como pequeños bocaditos.
En Inglaterra se lo conoce como jam penny por su forma redonda, y presenta un tamaño similar a la antigua moneda de penique, es muy fácil de imitar en casa. Así que si quieres comer un manjar como el de la reina, no dudes en prepararlo, es sencillo, económico y además es la combinación perfecta para un delicioso té.