Una sandwichera es un pequeño electrodoméstico demasiado útil en nuestra cocina ya que nos ayuda a preparar desayunos, meriendas y cenas muy sencillas en menos de cinco minutos. Si quieres limpiar tu pequeño electrodoméstico sin dañar las placas antiadherentes, presta atención a este truco infalible con remedios caseros. ¡No te llevará ni cinco minutos!
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Al tratarse de un aparato que suele utilizarse para resolver problemas y preparar algo rápidamente, no es raro que se quede enchufado a la corriente y que nos olvidemos de limpiarlo tanto externa como internamente. Pero si quieres seguir utilizando tu sandwichera durante mucho tiempo, debes saber cómo limpiar este electrodoméstico de manera fácil y rápida. Si atiendes este truco de limpieza tu sanwichera quedará reluciente en menos de cinco minutos.
Cómo limpiar la sandwichera por dentro
La limpieza de una sandwichera es una tarea sencilla e imprescindible para limpiar la cocina con éxito. En primer lugar, tenga en cuenta que no es aconsejable utilizar ningún tipo de producto químico o estropajo duro que pueda dañar el antideslizante. Si la adherencia se pierde, tus sándwiches no quedarán igual de deliciosos. Dicho esto, ¡a por ello!
Elementos que necesitamos
- Jabón líquido de manos o lavavajillas
- Papel de cocina
- Una bayeta limpia
- Una esponja suave
- Una espátula de silicona, para evitar elementos punzantes que puedan rayar las placas antiadherente
Paso a paso cómo limpiarla
Antes que nada apaga y desenchufa la sandwichera. Un dato clave es que es mejor empezar a limpiarla antes de que se enfríe del todo y todavía mantenga un calor residual, pues te resultará más fácil quitar migas y restos de comida. A continuación, retira los restos de comida de la sandwichera con un poco de papel de cocina.
Luego de retirar todos los residuos de comida, frota con una esponja con unas gotitas de jabón las placas de la máquina, con cuidado de no hacer mucha presión. Aprovecha y con la misma esponja con jabón, limpia la superficie exterior de la sandwichera y también el cable. Luego, pasa una bayeta o trapo húmedo, tanto por fuera como por dentro del aparato, y limpia los restos de jabón. Un consejo luego de haber realizado este proceso, ¡déjala abierta! pues así se secará bien antes de guardarla. Si tienes prisa, puedes pasar un trapo o un poco de papel de cocina seco.