El queso fresco (o cuajada) es uno de esos que sirve para una gran variedad de recetas, desde una tarta dulce hasta una deliciosa ensalada. Es de fácil preparación y hoy lo vamos hacer en casa en tan solo 10 minutos y con tres ingredientes, vamos a obtener el acompañante perfecto para todas tus comidas.
Te podría interesar
Es más que un tipo de queso blando obtenido generalmente de leche de vaca u oveja, este tipo de queso fresco no requiere de un proceso de maduración. Por lo que podemos decir que algunas de sus características más destacadas son su textura húmeda y blanda, su sabor suave, y su bajo aporte graso.
Ingredientes
- 2 litros de leche entera de vaca
- 80 mililitros de vinagre de vino
- 4 gramos de sal
Preparación
El primer paso de la receta es agregar la leche en una olla grande, colocar la sal, y el vinagre, remueve mientras llevas la mezcla a ebullición. Cuando empiece a hervir, retira la olla del fuego y deja reposar la mezcla unos 10 minutos. Pasar la mezcla por un colador. Luego pon un colador sobre un cuenco amplio de cristal y cúbrelo con un paño limpio de algodón. Vierte la mezcla de queso sobre el paño, recoge las puntas del paño, y escurrir bien antes de colocarlo dentro de un cestillo de plástico.
Una vez dispuesta la masa de queso en el cestillo, trabaja con las manos aplastándola y escurriendo el líquido hasta que vaya tomando la forma del queso. Para terminar de escurrirlo, coloca un trozo de papel absorbente doblado en 4 partes sobre un plato hondo y encima el cestillo con el queso.
Cubrirlo con otro trozo de papel doblado de la misma forma, y conservar el queso 5 horas en la nevera. Para desmoldar el queso fresco, retira ambos trozos de papel, y vuelca el cestillo sobre un plato. Conservar el queso en el refrigerador dentro de un recipiente de plástico con tapa, coloca papel absorbente por encima debes evitar el exceso de humedad.