Si te gusta cocinar debes tener muy en cuenta qué cosas no debes tener sobre tu mesada, primero que nada, para evitar que puedas cometer el error de una contaminación cruzada, o también, puede pasara que sin quererlo agregues por accidente un producto de limpieza a tus comidas y arruines toda una preparación. Toma nota de los cuidados que debes tener:
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Medicamentos y Productos de limpieza. Aleja los medicamentos de la cocina, en primer lugar, porque, de alguna forma u otra, pueden estar al alcance de los niños, lo cual es extremadamente peligroso. Por otro lado, los fármacos se pueden dañar si están cerca de cualquier fuente de calor como lo es el horno. en cuanto a los productos de limpieza, es muy común tener a mano lavandina o lejía, jabones, alcohol, desengrasantes. Sin embargo un pequeño accidente puede provocar que se contaminen los alimentos o que, en un caso extremo, se lleguen a ingerir sin quererlo.
Utensilios en mal estado. Si vamos a utilizar utensilios para preparar las comidas, es muy importante revisar el estado y filo de los utensilios que usualmente interactúan con carnes y verduras. Además, todo lo que esté roto, quemado, manchado o desgastado, debe retirarse de la cocina.
Plantas. Hay muchos lugares donde puedes colocar plantas y tu cocina no sería el lugar ideal. No todas las plantas son adecuadas para esta área, puesto que pueden aportar más humedad a los alimentos o simplemente ocupar lugar. Antes de llevar una planta a la cocina, averigua bien cuál será la indicada o decora otra habitación con ella.
Alimentos vencidos. Nunca es mal momento para revisar si tienes en tu alacena y heladera algún alimento en estas condiciones, con el fin de prevenir una intoxicación. Trata por lo menos una vez por semana revisar que las carnes, lácteos, frutas y las verduras no se encuentren en descomposición”. Te darás cuenta cuando un alimento de la cocina se vea o huela sospechoso.
Mascotas. Siempre es bueno enseñar a las mascotas a desplazarse por los sitios más adecuados para ellos. La cocina es una de las zonas del hogar que deben evitar puesto que pueden infectar algunos alimentos o, en el caso de los gatos, pueden transmitir toxoplasmosis.