Si bien las torrijas más tradicionales de nuestro país son las de leche y las de vino, las que prepara Miquel Antoja con anís son absolutamente perfectas, tienen las mejores características organolépticas y estamos seguros que una vez que las pruebes, no volverán a faltar en tu mesa ¡Toma nota de los siguientes ingredientes!
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Ingredientes para la crema
- 400 mililitros de leche entera
- 100 mililitros de nata para montar
- 100 gramos de azúcar
- 90 mililitros de yema de huevo
- 48 gramos de maicena
- La piel de medio limón
- La piel de media naranja
- Media rama de canela
Ingredientes para la base
- 200 gramos de pan brioche
- 500 mililitros de leche
- 500 mililitros de nata para montar
- 150 gramos de azúcar
- 2 huevos
- La ralladura de 1 limón
- La ralladura de 1 lima
- 100 mililitros de anís del Mono Seco o Dulce
Elaboración
Comenzamos este exquisito plato de Miquel Antoja mezclando todos los ingredientes de la primera lista, salvo el pan para preparar un baño. Luego colocamos el resultado en un recipiente lo suficientemente hondo como para cubrir por completo el brioche. Acto seguido, cortamos el pan en trozos gruesos y lo remojamos en la preparación hasta que esté lo suficientemente empapado en el interior.
Continuamos la receta preparando la crema. Para ello calentamos 300 mililitros de leche con la nata, la piel de limón y de naranja, y la rama de canela. Cuando rompe el hervor, apaga el fuego y deja el cazo tapado durante unos 10 minutos para que se infusione bien. Después, mezclamos con las varillas, la maicena, el azúcar con la leche restante, la yema de huevo y dejamos reposar todo en un bol.
Cuando la leche esté infusionada, colamos el líquido y cuando hierva nuevamente incorporamos la mezcla de yemas mientras continuamos removiendo con las varillas. Luego colocamos la crema en un recipiente con papel de plástico y reservamos en la nevera para utilizar en un siguiente paso de la receta.
Ahora es el momento de hacer las torrijas. Comenzamos a escurrir el brioche y lo doramos en una sartén con una nuez de mantequilla, colocando una línea diagonal de azúcar blanco por encima. Cuando esté lista, retiramos la torrija y la dejamos enfriar antes de incorporar la crema pastelera. Para terminar, colocamos un poco más de azúcar por encima y caramelizamos con un soplete.