La salsa bechamel o también conocida como salsa blanca, es un acompañamiento perfecto para tus comidas. Su consistencia cremosa y su sabor suave combina muy bien con casi cualquier plato. Hoy aprenderás cómo preparar una deliciosa receta: bechamel de cebolla.
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Para acompañar tus platos tienes muchas buenas opciones, desde una clásica ensalada, hasta los también bastante clásicos purés, pasando por pastas y arroces. Pero ninguno de estos platos sería nada sin una buena salsa que acompañe su sabor y resalte las mejores cualidades del platillo. Este es el caso de la salsa bechamel, una salsa blanca y cremosa a base de mantequilla y maicena que tiene sus orígenes en la cocina europea.
Recuerda que al poder utilizarla para diferentes tipos de platos, la consistencia que desees será diferente. Por ejemplo, si vas a utilizar tu salsa en un pastel, te recomendamos que la consistencia sea más espesa, por el contrario si la vas a utilizar para pastas, te conviene más líquida. Pon manos a la obra y descubre nuestra receta.
Ingredientes:
1 cucharadita de maicena
1 cebolla
nuez moscada o pimienta
sal
50 grs de mantequilla
500 ml de leche
Paso a paso:
Primero comienza picando la cebolla en trozos bien pequeños. Luego, calienta en una sartén la mantequilla.
Añade la cebolla y deja que se dore en la mantequilla sin que se queme. Cuando esté dorada, añade la maicena, mézclalo bien y déjalo cocinar por un minuto a fuego mínimo. Añade la leche en tandas, si está tibia mejor, utiliza las varillas para disolver los grumos.
Luego, condimenta con sal y nuez moscada o pimienta. Deja que se cocine por un momento más y revuelve hasta conseguir la consistencia deseada.