Aunque no lo creas los ingredientes más sencillos nos permiten elaboraciones deliciosas y originales. Las tostas de queso con tomate pueden convertirse en diferentes alternativas tanto para aperitivos como cenas ligeras o entrantes perfectos. Te proponemos 5 recetas con estos alimentos como base.
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Mozzarella, tomates cherry y rúcula. Estos tres ingredientes conforman junto con aceite de oliva, sal y pimienta resulta un entrante o aperitivo ideal para cualquier ocasión. Aprovechar el pan que nos ha sobrado para crear tostas gourmet es otra opción si utilizamos, por ejemplo, queso de untar, tomates secos hidratados y aceite de oliva. Una receta clásica que siempre triunfa.
Las tostas son un tipo de sándwich con un extremo abierto y su contenido sobre le pan suele ser un elemento cárnico con verdura y puede ser dulce o salado. El pan integral también es una buena opción para una receta de tosta de queso con tomate. En este caso utilizaremos queso fresco de cabra desmigado, tomates cherry asados que rociamos con aceite de oliva. Para acabar añadimos hojas de albahaca cortadas por encima.
Otra gran alternativa es tostar el pan de barra que siempre tenemos en casa y cortar tomates en dados, saltearlos en la satén hasta que se caramelicen y agregar encima queso straciatella o burrata, según nuestras preferencias. Una torta que quizá se vuelve una de tus preferidas si utilizamos ingredientes como queso con tomate.
Una tosta también puede transformase en una pequeña pizza si utilizamos los ingredientes correctos. Para ello, utilizamos pan tostado ligeramente con mantequilla en una sartén y añadimos sobre éste tomates cherry cortados en rodajas y rallamos queso como mortadella. Horneamos unos minutos a 180º grados. No obstante, sin queremos una receta algo más original podemos utilizar pan tostado, queso feta, jamón serrano, tomates cherry, rúcula y mostaza francesa antigua o Meaux.