Las torrijas son un clásico de las festividades religiosa. Todos los que lo han probado dicen que es el dulce más típico y tradicional. Pocas son las familias españolas que no lo preparan en estas fechas. No obstante, la mayoría suele recurrir a la receta clásica, sin saber que existen alternativas para variar un poco, que nunca viene mal.
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Que mejor que en semana santa intentes hacer en familia una receta distinta y original. Se dice que entre estas torrijas que se rompen los esquemas, encontramos las valencianas, que son muy originales y sabrosas también. Por eso, te explicamos cómo prepararlas para que las puedas probar y disfrutar con los tuyos.
Los expertos de la cocina, afirman que la chufa valenciana es un alimento milenario que, por sus propiedades y composición nutricional, se puede hasta considerar un superalimento. Dicho esto, ¿qué debe tener una torrija para poder considerarse valenciana? Pues su ingrediente más característico. Obtendrás una torrija con un alto valor nutricional y con un sabor diferente que seguro que te encantará.
Para la elaboración de esta torrija en semana santa, vamos a comenzar dejando las rebanadas de pan remojadas en horchata toda la noche o durante unas horas. Tienes que asegurarte de que se empapan bien. Luego, pásalas por huevo y fríelas en aceite de girasol. Te preguntarás por qué se utiliza este aceite y no el de oliva virgen extra, y la respuesta es simple: el de oliva es más fuerte y le quita el sabor a la horchata.
Para tu torrija valenciana, haz unas falsas natillas utilizando más horchata, un poco de harina de maíz, una yema de huevo y una cucharada de azúcar. Mézclalo todo bien y ponlo a cocer hasta que espese lo suficiente. La mezcla debe adquirir un aspecto muy similar al de las natillas.
Ingredientes necesarios
- Horchata de chufa de Valencia
- Pan del día anterior
- Huevos
- Un poco de harina de maíz
- Aceite de girasol
- Azúcar glass