Cuando nos hablan de sopa de tomate, nos imaginamos primero que nada un gazpacho andaluz o un salmorejo cordobés, que efectivamente, son sopas hechas con tomate, pero en su versión fría, ideales para el verano. Si quieres preparar una sopa caliente, que funciona cuando hace fresquito o hay lluvia, aquí te enseñamos cómo preparar la sopa de tomate perfecta.
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Receta de sopa de tomate fácil y rápida
Esta receta es muy buena opción para aquellas personas que necesitan recetas saludables, ya sea porque están a dieta o porque les gusta comer alimentos frescos y naturales.
Además, esta sopa de tomate es una receta vegetariana, así que te funciona perfecto si sigues este estilo de vida.
Ingredientes
- 500 gramos de tomates
- ½ cebolla
- 1 diente de ajo
- ½ pimiento
- 1 hoja de laurel
- Sal
- Pimienta
- Aceite de oliva
Elaboración paso a paso
- Llena una olla con agua y pon los tomates a hervir por 1 minuto, sácalos y mételos en agua fría. Con esto vas a poder quitarles la piel fácilmente.
- Una vez sin piel, pica los tomates en cubos pequeños y reserva.
- Pica la cebolla, pimiento y ajo muy pequeños y sofríelos en una sartén con aceite de oliva. Cocínalos hasta que la cebolla y el ajo se doren, pero cuidando que no se te vayan a quemar.
- Añade los tomates picados, la hoja de laurel, y una pizca de sal y pimienta. Agrega 2 vasos de agua o, si lo prefieres, puedes usar caldo de verduras.
- Baja el fuego a la mitad y deja que hierva durante 30 minutos. Revuelve de vez en cuando y revisa que esté bien de sal.
- Transcurrido este tiempo puedes hacer 2 cosas: dejar la sopa de tomate tal como está, con trozos de la verdura, o licuarla. Si decides licuarla quítale primero la hoja de laurel.
- Una vez licuada, ya tendrás lista tu deliciosa y fácil sopa de tomate.
CONSEJOS PARA UNA SOPA DE TOMATE PERFECTA
- Usa tomates bien maduros, que tengan bastante jugo.
- Puedes pasar la sopa por un colador si quieres una textura aún más fina.
- Al servir tu plato, puedes decorar con hojas de perejil fresco o albahaca. También puedes ponerle croutons de pan y por supuesto, un chorro de aceite de oliva virgen extra.
- Un poco de queso parmesano rallado le va de maravilla.
- También tienes la posibilidad de picar medio tomate extra, pasarlo por una sartén con aceite de oliva a fuego suave por un par de minutos y ponerlo en el plato al momento de comer.
- Si te gusta el picante, puedes ponerle un trozo de guindilla roja.
Como acompañante, el pan fresco es perfecto. Una o dos rebanadas que puedes ir mojando a medida que te la vas tomando.