Al consumir animales nuestro cuerpo ingiere músculo, dejando de lado el resto de aportación nutricional que nos brinda este alimento. A través de recetas como el caldo de huesos podemos extraer nutrientes como el colágeno, formado por aminoácidos no esenciales que ayudan al desarrollo del organismo en múltiples funciones.
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¿Qué es el colágeno?
El colágeno es la proteína principal de nuestro organismo, tal como explica la bloguera Laura García M., y se localiza en la piel, ligamentos, músculos, tendones, huesos, tejidos conectivos o cartílagos. El colágeno aporta fuerza y elasticidad a la piel y tiene un papel clave en diferentes funciones, la reparación de huesos y vasos sanguíneos, entre otras.
¿Por qué debemos tomar caldo de huesos?
Debemos tener en cuenta que a partir de los 35 años nuestro cuerpo ya no sintetiza de forma óptima el colágeno por lo que una aportación externa siempre será beneficiosa para nuestra salud. Otros factores también pueden influir en esta carencia como el estrés, la exposición solar, el consumo excesivo de azúcar o el tabaco. Por todo ello, conviene incorporar alimentos como el caldo de huesos, rico en colágeno.
Ingredientes para el caldo de huesos
- 1 kilo de huesos de ternera (o bien huesos de pollo, cerdo, pavo, cordero, o una combinación)
- 3 cebollas
- 2 puerros
- 2 zanahorias
- 1 rama de apio
- 4 hojas de col verde
- 2 cucharadas de vinagre de manzana
- 1 cucharadita de cúrcuma (opcional)
- 1 ramita de perejil
- 1 diente de ajo
- 1 cucharada de tomillo o romero
- 1 cucharadita de jengibre en polvo o fresco
- 1 hoja de laurel
- 1/2 cucharadita de semillas de cilantro recién molidas
- 1 vaina de cardamomo
- 2 o 3 litros de agua
- Opcional: 1 cucharadita de sal o al gusto, también puedes omitirla ahora y añadirla antes de consumir el caldo
Preparación de la receta de caldo de huesos
Colocamos todos los ingredientes en una olla grande a temperatura baja. En las olla de cocción lenta esta caldo se debe cocer entre 24 y 36 horas, mientras que en las ollas a presión deberá estar listo en unas 2 horas y medio. Tras completar este paso debemos dejarlo enfriar y, seguidamente, retirar los huesos y las verduras y envasar el líquido en recipientes de cristal. En la nevera se podrán consumir durante unos 5 o 6 días. Antes de calentar el caldo de huesos retira la grasa que se solidificará en la parte superior del bote. No te pierdas esta receta tradicional para aumentar el colágeno.