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Cuál era el té preferido de la reina Isabel II

Para hacer honor a su memoria, hoy te contamos cuál era la opción preferida de la monarca inglesa a la hora del té.

Cuál-era-el-té-preferido-de-la-reina-Isabel-II.Fuente: Producción Gastrolab
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Luego de su triste fallecimiento a sus 96 años, muchos medios de comunicación y redes se dedicaron a hablar de la vida de la extraordinaria Reina Isabel II; sus costumbres británicas, su familia y mucho acerca de su mandato, entre otros. Pero un tradicional ritual de la monarca inglesa, ya sea en el Palacio de Buckingham o en cualquier parte del mundo donde se encontrara, era la especial hora del té. Por eso, para hacer honor a su memoria, hoy te contamos cuál era su té preferido.

En Gran Bretaña, por una tradición cultural inglesa de tres siglos, el se disfruta entre las 15:30 y las 17:00 horas, acompañado de varios sándwiches y postres. En su vida cotidiana, Isabel II desayunaba a las 7:30 una taza de Twinings English Breakfast, acompañado de algunas galletas o emparedados pequeños. Por la tarde, en la hora del té, en punto de las 16:00 horas bebía variedades Darjeeling o Earl Grey.

Foto: IHerb

Según Grant Harrold, ex mayordomo del Palacio de Buckingham, a ella le gustaba el Assam, pero su variedad favorita era el Twinings Earl Grey, siempre llevaba consigo una cajita cuando viajaba. Además, agregó que Isabell II jamás tomaba las bolsitas de té, sino una infusión preparada con hierbas y un colador.

Las historias británicas cuenta que este se llama así por el conde Charles Grey, quien fue Primer Ministro Británico entre los años 1830 y 1834; recibió la infusión como un obsequio diplomático de China en esos tiempos, con una base de bergamota que luego se volvió muy popular y muy utilizados para los tés de calidad.

Foto: Pixabay

Fiel a las costumbres, mandatos y hábitos de la realeza de Isabell II, el se servía exclusivamente desde una tetera. Ella por su parte, le agregaba la leche templada, lo tomaba sin azúcar y para mezclarlo lo hacía con movimientos circulares y precisos para así no tocar los bordes de la taza, ya que le molestaba el ruido.