Si queremos mejorar nuestro aspecto, el cuidado de piel tiene que comenzar desde dentro. La dieta y hábitos alimenticios se vuelven cruciales para mantener una correcta hidratación y, entre otros beneficios, retrasar o reducir los signos del envejecimiento. En este sentido, batidos contra arrugas como este smoothie de kiwi con plátano son perfectos, ya que favorece, entre otros muchos beneficios, la producción de colágeno.
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Los beneficios del kiwi para nuestra salud
Quizá no sepas que el kiwi aporta el doble de vitamina C que una naranja -la fruta estrella vinculada a este nutriente-. Esta fruta de color verde, deliciosa y habitualmente cara, también dobla contiene vitamina A y dobla la cantidad de vitamina E que otras como el aguacate. Tal como recuerda el periódico La Vanguardia, todas estas propiedades convierten al kiwi en una gran fuente de antioxidantes que favorece la producción de colágeno, una gran defensa para el sistema inmunitario así como un aliado para el sistema digestivo.
Los efectos positivos del plátano para tu piel
El otro ingrediente estrella de este batido natural contra las arrugas es el plátano. Esta fruta, siempre popular por su contenido de potasio, también ofrece otros muchos beneficios a nuestra salud. El plátano contiene vitaminas C, E, A y B12 que tu piel agradecerá, que ya que la hidrata y suaviza. Esta fruta no solo mejora el estado de ánimo y evita el insomnio sino que también, como señalan desde el portal de Vogue, favorece la síntesis de colágeno, imprescindible para el cuidado de la piel.
Ingredientes para el smoothie de kiwi con plátano
- 1 kiwi
- 1/2 plátano
- 1 taza de agua de coco
Preparación
Nada tan sencillo como colocar en un vaso para licuadora y batir la fruta junto al agua de coco. Este tipo de bebidas naturales aportarán hidratación para toda la jornada y numerosos beneficios para la salud y el cuidado de la piel, así como te ayudarán a disminuir los efectos del paso del tiempo como las arrugas. Podemos modificar el agua de coco en este smoothie de kiwi y plátano por leche o agua si así lo preferimos.