Este restaurante ha puesto al servicio público el lujo y el refinamiento de la Mesa y la Cocina Francesa, declaradas en 2010 Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO, por un precio de 57 euros; la mitad para niños de entre 6 y 10 años y menores de 6, gratis.
Considerado el mejor restaurante de Francia, por la prestigiosa Guía Gourmand, ubicado en la ciudad de Narbona. Con una historia de 2,500 años, al suroeste del país galo, “Les Grands Buffets”, creado en 1989 por Jane y Louis Privat, recibe anualmente 400 mil comensales en sus palaciegos salones, rodeados de obras de arte y bellísimos jardines, para que los clientes disfruten de la excelencia gastronómica de siglos pasados. Recuperada en el siglo XIX, por Auguste Escoffier, el célebre Chef que popularizó la alta cocina tradicional francesa y la rescató del olvido.
“Les Grands Buffets” posee el Guinness World Records por la mayor colección de quesos del mundo: 111 variedades que van acompañados del mejor Champagne Mercier de “Möet & Chandon”. Hay 500 kilos de queso instalados cada día para su consumo. Es el primer restaurante de Francia en términos de facturación, con más de 25 millones de euros. Hay más de 300 platillos y 45 platos elaborados al momento. Cuenta entre otras joyas, con el pato a la sangre (Canard au Sang) y la liebre (Liévre a la Royale). La inigualable oferta supone un verdadero festín, a la usanza de la época de Luis XIV, el Rey Sol, a quien se dedica una imperial carpa, entre otros salones, como el espléndido comedor dorado con 18 mil hojas de oro.
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Ni el más exigente paladar podría resistirse a degustar las ostras, los mariscos, la cascada de bogavantes, las variedades de foie gras, el “Coquille Saint Jacques Gratiné” el “Vol au Vent” el cochinillo, el magret de pato, el rodaballo al horno, el hígado de ternera en salsa persillade, el jabalí encebollado, las ancas de rana, los jamones o los estofados y una infinidad de platos más.
Para maridar, “Les Grands Buffets” ofrece una carta de grandes vinos con una selección de 170 referencias procedentes de la Borgoña, Burdeos y los mejores caldos de la Región de Occitania. La botella de Champagne “Moët & Chandon” está a precio de bodega, 25 euros. El restaurante tiene el Premio Especial del Jurado en 2019 por la carta de vinos más completa de Francia.
En cuanto a los postres, hay 96 variedades en una preciosa galería llena de tentaciones para los más golosos, con irresistibles recetas de macarons, pasteles y exquisiteces de chocolate. Recomendación especial, las crêps suzette preparadas al instante recién flameadas. Otra mención única la merece “El Palais des Glacés” para los amantes de las delicias heladas. Este espacio con espejos dorados, mármol, frescos y preciosas vitrinas evocan la atmósfera de las casas parisinas con solera. Aquí se degustan helados artesanos acompañados de chantilly casero.
El trato amable y profesional de los 220 empleados, 99 cocineros, 107 meseros y 7 reposteros, a las órdenes del propietario Louis Privat, hacen posible el milagro de que cada comensal se sienta atendido como un auténtico rey o reina.
En virtud de un acuerdo con la compañía ferroviaria española RENFE, hay conectividad con el tren de alta velocidad AVE con Narbona todos los días. Desde Madrid se llega en tan solo 5 horas y desde Barcelona en 2, en un viaje muy cómodo con un hermoso paisaje que forma parte de una experiencia inolvidable.