¿Recodáis cómo siempre estamos con la lata de reducir la huella ecológica? En esta ocasión os traemos un fertilizante casero que sirve perfecto para aprovechar algunos desechos de la cocina, por ejemplo, las cáscaras de cebolla y los restos de café. David, el responsable del canal de YouTube, Cultivo Paso a Paso, nos dice que esta mezcla es un boost de potasio, fósforo, magnesio, calcio, hierro y cobre para las plantas, recordemos que todos estos elementos son indispensables para el buen desarrollo de nuestras plantas ¿Queréis aprender a preparar este fertilizante? Seguid leyendo.
Beneficios de la cáscara de cebolla para las plantas
El portal Infoagro, resalta que las cáscaras de cebolla son un buen fertilizante y un agente de control de plagas. Podéis cuidar de vuestro huerto en casa con ellas. Además, contiene una serie de micro y macroelementos (vitaminas de los grupos A y B, calcio, hierro, potasio, fósforo y zinc), todos son muy necesarios para el desarrollo de las plantas, y también contienen una sustancia que puede inhibir las colonias de hongos y microorganismos del suelo. La cáscara de cebolla hace frente a las invasiones de insectos como pulgones, trips, ácaros.
¿Cómo preparar fertilizante casero con desechos de cocina?
Ingredientes
- 5 cdas de restos de café
- 1 L de agua
- Piel de cebolla (opcional)
Procedimiento
- Mezcla los ingredientes en un recipiente.
- Déjalos reposar por 24 horas. El recipiente debe estar abierto para evitar la proliferación de hongos y la evaporación de cloro.
- Cuela el agua con café y reserva.
- Trocea finamente la piel de cebolla.
- Agrégales agua y déjalas reposar por 24 horas.
- Cuela el agua con la cebolla y reserva.
- Una vez que los líquidos hayan reposado, mézclalos en otro recipiente a partes iguales
Precaución no tenga hongos
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¿Cómo aplicar el fertilizante casero con desechos de cocina?
El canal de YouTube, Cultivos paso a paso, nos dice que debemos aplicar este fertilizante casero diluido, no es recomendable utilizarlo en su estado original, pues según una prueba de pH, demostró que el agua con cebolla tiene una acidez superior al agua corriente, aunque no es peligrosa para las plantas, es mejor prevenir que lamentar. La mezcla se tiene que diluir al 50% con agua y hay que regar las plantas como de costumbre con este abono líquido hasta que la tierra quede completamente impregnada. Se puede aplicar cada 15 o 20 días en época de floración y en invierno cada 30 o 40 días.