La fritura es un elemento importante en la gastronomía en España. Desde unas simples patatas, unas croquetas o unos pescaditos forman parte del día a día de la cocina en nuestro país desde hace cientos de años. A pesar de estar inmersos entre los fogones de tiempo atrás, la realidad es que siempre existe la duda de cuándo se debe comenzar a poner la comida en el aceite a freír.
En esta ocasión vamos a revelar el truco de muchos chefs de talla mundial que usan para que los platillos que deben de freírse estén perfectos y con un crujiente que dejará a todos con la boca abierta. La realidad es que todo depende de la temperatura. Si se sabe cuál es la temperatura ideal se podrá realizar ese crocante tan anhelado que la gente busca en sus croquetas.
Para poder tener esta temperatura perfecta y posteriormente en crujiente deseado se deben considerar ciertos factores. Además de los grados a los que debe estar el aceite, también es importante revisar el tiempo que se debe mantener la comida dentro para que se pueda realizar una cocción completa, así como el que no se queme o salga un poco aguada en algunos puntos.
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¿Cuál es la temperatura ideal para freír?
Lo primero que debemos saber es que la temperatura ideal depende del alimento que se va a cocinar. Por ejemplo, para unas patatas fritas se debe meter a cuando esté el aceite a unos 175° C. Si se trata de pollo deberá poner en el aceite cuando esté a unos 190° C. Si son algunos alimentos rebozados como croquetas o nuggets debe estar en torno a los 180° C.
Un detalle importante es mantener la temperatura durante todo el proceso de cocción, ya que si se baja, el resultado sería un alimento blando o grasiento. Si se eleva demasiado podría quemarse. Por eso se recomienda tener un termómetro de cocina en casa para poder mantener la temperatura ideal siempre.
Tips para un crujiente perfecto
- La temperatura del aceite. Especial para cada producto.
- El tipo de aceite que se utiliza. Mientras mejor sea la calidad, mejor el resultado.
- La técnica de fritura específica para cada alimento.
- Alimentos secos antes de freírlos. Evitar meterlos congelados o con un poco de agua
- No sobrecargar la sartén.
Después de estos consejos solo queda aplicarlo. Con el paso del tiempo encontrarás ese crujiente perfecto que todos tus familiares y amigos amarán cada que vayan a tu casa a comer.