Una de las tareas más desafiantes cuando llegamos a una nueva casa, es como convertirla en un espacio con el que nos sintamos realmente cómodas y seguras. Se suele pensar que las decoraciones imprimen una parte de nuestra esencia sobre los lugares donde las ubiquemos, pero debido a la industria de la masificación, una misma pieza puede replicarse millones de veces, dejando muy atrás la idea de la originalidad y ni hablar de la cantidad de desperdicios que generan.
Buscando contribuir con la cultura del reciclaje, hoy vamos a convertir un pote de helado en un excelente adorno que aloja cualquier tipo de planta. Solo sigue leyendo que aquí debajo te dejamos la lista de materiales a utilizar y cómo debes hacerlo.
¿Cómo hacer una maceta reciclada?
Solo vas a necesitar de los siguientes materiales:
- Pasta para resanar muros.
- Pegamiento.
- Pinturas acrílicas.
- Pote o envase plástico de helado.
Sigue este sencillo paso a paso para crear tu manualidad:
- Pega la tapa del recipiente.
- Haz un corte sobre la base del pote de aproximadamente dos centímetros.
- Combina la pasta para muros con pintura acrílica de tu color favorito.
- Una vez tu pintura adquiera una consistencia uniforme, aplícala con ayuda de una esponja de maquillaje o brocha.
- Espera aproximadamente 12 horas hasta que seque completamente.
- Pasado el tiempo solo resta colocar tu planta favorita.
Siguiendo esta guia podrás transformar los potes en hermosas piezas de decoración, que además de ir perfectas en casa, reducirán tu huella de carbono por ser 100% recicladas.