La alopecia es una enfermedad para la que, a lo largo de la historia, se han buscado multitud de soluciones. La calvicie y caída del cabello es una preocupación muy frecuente, tanto para mujeres como para hombres, para los que, en algunos casos, también lo es la ausencia de vello facial o barba. Muchos expertos han recomendado el minoxidil para combatir estos problemas, pero antes de que corras a comprarlo, te decimos todo lo que necesitas saber antes de utilizar minoxidil.
¿Qué es el Minoxidil?
Se trata de un medicamento antihipertensivo que inicialmente se utilizaba para combatir los problemas de tensión arterial. Con el tiempo se descubrió que no era muy eficaz para esta finalidad, sin embargo tenía un efecto secundario que los científicos encontraron muy interesante: el fortalecimiento del cabello y la estimulación del crecimiento de cabellos nuevos, gracias a su efecto vasodilatador.
A partir de ahí se empezó a desarrollar el minoxidil como medicamento contra la alopecia, y ha resultado tan efectivo que hoy es uno de los tratamientos más populares. De hecho, es tan popular que puedes encontrarlo casi en cualquier farmacia. Pero su uso no debe tomarse a la ligera, recuerda que es un medicamento y solo debes usarlos si tu médico o tu dermatólogo lo recomienda.
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Para qué sirve
Pese a que es un eficaz remedio contra la caída del cabello, es importante mencionar que su función principal es mantener y fortalecer el pelo, no recuperarlo. Para esto último solo hay una solución: el trasplante capilar. Así que lo recomendable es utilizar el minoxidil cuando la alopecia se encuentra en etapa temprana.
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Cuánto dura el tratamiento
Una vez que empiezas con Minoxidil, empezarás a notar cambios pasados 5-6 meses, siempre que sigas las pautas de tu médico. Es posible que, durante la primera fase, comiences a sufrir una caída del cabello intensa, pero no te preocupes ni interrumpas el tratamiento, porque esta pérdida parcial forma parte del proceso.
Considera que el tratamiento debe ser continuo. Si lo detienes tomará 3 o 4 meses para que vuelvas al estado en el que comenzaste. Por eso es importante que, si decides usar minoxidil, permanezcas constante con el tratamiento.
Efectos secundarios
El minoxidil, en algunos casos, puede presentar los siguientes efectos secundarios:
- Dolor de cabeza, como consecuencia de la vasodilatación.
- En algunos casos, puede aparecer vello en zonas como patillas, mentón y brazos. Por eso también se utiliza como tratamiento para el crecimiento de la barba.
- Problemas poco frecuentes a nivel cardiovascular.
- En la aplicación tópica se puede producir irritación o dermatitis.
Si presentas cualquiera de estos síntomas acude a tu médico. Recuerda que consumir más minoxidil del recomendado no hará que tu cabello crezca más rápido, pero sí aumentará el riesgo de sufrir efectos secundarios.
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¿Cómo se utiliza?
Hay dos vías de aplicación: tópica, es decir, directamente sobre el cuero cabelludo o ingerida en forma de pastillas.
En la forma tópica se debe utilizar Minoxidil 5% 2 veces al día. Esparce la cantidad indicada por tu médico en la zona afectada y extiende el producto con los dedos. Recuerda no lavarte el cabello hasta pasadas mínimo 4 horas desde la aplicación, y mejor evita el secador. Lávate bien las manos después de aplicarlo.
La dosis para la vía oral dependerá de muchos factores, por lo que es una dosis personalizada que debe ser indicada por un profesional.