Las uvas son las frutas que dan como resultado el vino, pero también son alimentos que no deben faltar en una dieta saludable y variada, dadas sus propiedades beneficiosas. Este fruto de la vid es depurativo, ayuda a combatir la retención de líquidos, disminuir inflamaciones y depurar el hígado.
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Potasio, vitaminas y ácidos orgánicos, son algunos de los nutrientes que poseen las uvas. Son fuente de antioxidantes, ayudan a desinflamar el vientre y a regular el azúcar en sangre. Este alimento también es bueno para combatir el cansancio y levantar el ánimo, gracias al contenido de vitaminas del grupo B.
Dos ingredientes para desinfectar las uvas
Antes de consumir algún tipo de uva, es necesario desinfectarla correctamente para no poner en riesgo la salud del sistema digestivo y el bienestar del cuerpo en general con bacterias u otros microorganismos. Los ingredientes que necesitas para llevar a cabo tal tarea son: vinagre blanco y agua. Coloca este último líquido en un recipiente bien grande.
Con el agua dentro del recipiente, debes agregar el vinagre blanco. La cantidad tiene que ser de una cucharadita del líquido ácido diluida en tres tazas de la otra sustancia. Luego revuelve para que se integren y coloca las uvas que desees desinfectar de esta manera. Es necesario que el racimo quede bien cubierto, para que no queden zonas sin sumergir y por lo tanto sin limpiar.
Tienes que dejar reposar las uvas entre 10 y 20 minutos para desinfectarlas en el remojo mencionado y luego, al retirarlas, debes enjuagarlas y secarlas con papel absorbente o paño limpio. El procedimiento mencionado es necesario para desinfectar la fruta y, además de quitarle bacterias, retirar la película que se denomina ‘floración’ y es una protección natural contra agentes externos. Si bien no presenta riesgos para nuestra salud, puede volver el alimento amargo o con textura pastosa en el paladar.